La extradición de Linaza

Le MondeLa extradición de Tomás Linaza Echevarría no será concedida. Ni él ni los otros vascos españoles que Madrid reclama a París. Mauroyse ha comprometido el lunes en el Club de la Prensa de Europa" I.Esta actitud es lógica, pero nueva. Mitterrand es hostil a las extradiciones por motivos políticos. Lo ha repetido en el curso de su campaña electoral. A este respecto. Francia ne hace más que respetar los acuerdos que ha firmado especialmente la convención franco-española de 1877. Bajo el septenato precedente. sin embargo nunca el Goblerno se había opuesto a las extradiciones a las que había dado una opinión favorable.

Francia desea volver a su tradición de tierra de asilo en el seno de una Europa inquieta por el terrorismo y que, debido a ello, ha multiplicado las legislaciones de excepción. Es la dimensión internacional de las declaraciones de Mauroy.

Esta actitud suscita en España la más viva indignación. Algunas horas después de las declaraciones de Mauroy, el embajador de Francia en Madrid era convocado al Ministerio de Asuntos Exteriores y se le rogaba una explicación.

Preocupados por la actitud que el Ejército hace pesar sobre la democracia los partidos españoles sin diferencias de tendencias, desean que París conceda la extradición a Linaza. Mauroy ha escogido otro camino, que aleja el peligro de represalias contra los intereses franceses al sur del Bidasoa pero no el riesqo de excursiones de comandos españoles en el País Vasco francés.

Acusado de haber participado en crímenes de ETA sobre todo del asesinato de seis auardias civiles, Linaza será puesto en libertad. Así lo determina la ley francesa. Para tranquilizar a España, Francia debe demostrar que las declaraciones de firmeza frente al terrorismo vasco, que el Gobierno se prepara a renovar en el curso del Consejo de Ministros del miércoles, tendrán efectividad. En caso contrario, el próximo viaje de Cheysson a Madrid corre el riesgo de saldarse con un fracaso.

10 de junio.