La intervención del rey Juan Carlos, decisiva para la firma del acuerdo hispano-marroquí

Sin la intervención del rey Juan Carlos no se hubiese firmado el acuerdo pesquero España-Marruecos, ha declarado al programa Onda Pesquera, de Radio San Sebastián, un portavoz de la delegación marroquí que firmó la pasada semana dicho acuerdo.A altas horas de la noche, y cuando ambas delegaciones estaban a punto de la ruptura total de las negociaciones -concretó el portavoz marroquí-, don Juan Carlos telefoneó en dos ocasiones al rey Hassan de Marruecos para que este último interviniese cerca de su representación, al objeto de lograr un entendimiento.

La intervención de don Juan Carlos hizo posible la firma de este importante acuerdo pesquero, cuya gestación pasó por momentos muy difíciles, ya que la delegación marroquí intentaba conseguir, según Onda Pesquera, que sus cítricos circulasen por territorio español, así como otras exigencias que no podían ser aceptadas por la delegación española.

Por otra parte, un nuevo enfrentamiento entre España y el Frente Polisario, a través del marco pesquero y con graves consecuencias para la seguridad de los pescadores que faenan en los caladeros saharauis, es previsible, según se desprende de la primera reacción del movimiento saharaui a los acuerdos de pesca suscritos recientemente en Madrid entre las autoridades españolas y marroquíes, informa Manuel Ostos desde Argel.

Una declaración del representante del Polisario en Europa occidental, Ismael Fadel, difundida ayer en la capital argelina, indicaba que el Frente, en espera de conocer el contenido exacto de los acuerdos hispano-marroquíes, alberga la esperanza de que éstos «no vayan en perjuicio de los intereses sustanciales del pueblo saharaui, del contenido y el espíritu del acuerdo firmado en Argel entre el Gobierno español y el Frente Polisario el 17 de diciembre de 1980».

La prudencia del comunicado se justifica por el deseo del Polisario de no reaccionar de una forma violenta a los acuerdos firmados entre el ministro español de Agricultura y Pesca, Jaime Lamo de Espinosa, y el marroquí de Comercio y Pesca, Azzedin Guessus, en presencia de los jefes de las diplomacias respectivas, José Pedro Pérez-Llorca y Mohamed Bucetta. Al parecer, el movimiento independentista saharaui se ha visto defraudado ante la falta de una reacción española, comunicada por los canales diplomáticos, para explicar y justificar el convenio, en función de los compromisos que la parte española aceptara, implícitamente, al firmar el comunicado conjunto hispano-saharaui, a finales del pasado año.

El texto español de esa declaración señalaba que el Frente Polisarío, en nombre del pueblo saharaui, reiteraba su «rechazo categórico a todo lo que pueda afectar a la integridad territorial del Sahara occidental», y agregaba más adelante que las dos partes, una vez constatada la utilidad de sus contactos, coincidían en la conveniencia de continuarlos en el futuro.