Cuarenta montajes teatrales en el festival de Sitges
Un total de cuarenta montajes teatrales concurren este año a la decimotercera edición del Festival Internacional de Teatro de Sitges, cuyas representaciones se inician hoy, viernes. El relieve de los montajes presentados en las últimas ediciones y la resonancia que el festival ha alcanzado en los círculos teatrales internacionales ha situado este certamen a la cabeza de los que se celebran actualmente en España. La organización del festival corre a cargo de la Dirección General de Teatro del Ministerio de Cultura, del departamento de Cultura de la Generalidad y del Ayuntamiento de Sitges.
De las cuarenta obras presentadas, dieciséis proceden de compañías teatrales extranjeras. Destaca la participación, por primera vez en el certamen, de Cuba y su Teatro Estudio de La Habana. La compañía cubana presenta tres montajes: uno de ellos, Bodas de sangre, de Federico García Lorca. Quince de las veinticuatro obras restantes corresponden a grupos teatrales de Cataluña. Las demás se deben a compañías del resto de España. Destaca la participación del Teatro Estable de Valencia, con la obra De un tiempo a esta parte, original de Max Aub y dirección de Casimir Gancia, obra que se presenta como homenaje a Max Aub.A nivel general, la edición actual del festival presenta unas constantes muy definidas. El retorno al autor, un renovado interés por Lorca y una creciente preocupación por lo último del teatro alemán, serían algunas de estas constantes. Según Ricard Salvat, director del festival, «el retorno al autor comporta el olvido de las formas del teatro creadas desde un colectivo». Para Salvat, Lorca ha pasado a ser en el extranjero un clásico moderno sobre quien se pueden arriesgar las lecturas personales más atrevidas. En cuanto al interés creciente hacia el teatro alemán, Salvat, citando a un crítico italiano, califica de «síndrome alernán» este interés, que centra principalmente en la generación de autores contemporáneos, que parte tanto de Brecht como de Oden von Horvath y Mrielu Eluisse Fleisser.
En la presente edición se han establecido un total de cuatro premios: Santiago Rusiñol, Artur Carbonell, Cau Ferrat y Lysistrata. El Santiago Rusiñol está dotado con 150.000 pesetas y está destinado al mejor texto inédito escrito en la lengua de cualquier nacionalidad ibérica.
El mejor espectáculo teatral inédito presentado en el festival obtendrá el Premio Artur Carborell, dotado con 250.000 pesetas. La mejor aportación artística al festival será honrada con el premio honorífico Cau Ferrat, mientras que un jurado compuesto por militantes feministas otorgará el Lysistrata a la obra teatral. en la que concurran destacados valores feministas.
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