El Gobierno español estudia un aplazamiento de la Conferencia de Seguridad de Madrid

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La entrevista Aguirre de Cárcer-Rogers tuvo lugar en Mons, sede del cuartel de la Alianza Atlántica. y se trataba formalmente de una visita de cortesía, en el curso de la cual el diplomático español presentó al general Rogers al agregado militar de la embajada española, teniente coronel Chamorro, del Ejército del Aire.

Según fuentes bien informadas consultadas por EL PAIS, el Gobierno español está preocupado por las repercusiones de la crisis de Afganistán en la conferencia de Madrid. en la que el presidente Adolfo Suárez tiene colocadas grandes esperanzas en cuanto al lanzamiento internacional de España. El embajador Aguirre de Cárcel podría haber explicado al ,general Rogers esta preocupación.

La primera reunión preparatoria de la conferencia tendrá lugar, según el calendario inicialmente previsto, el próximo mes de septiembre, pocas vjornadas después de la olimpiada de Moscú. Si, como todo hace prever, Estados Unidos y otros países aliados boicotean los Juegos, la reacción soviética será lógicamente muy dura. El Gobierno español afirma comprender las motivaciones norteamericanas para el boicot -influir en la opinión pública soviética, forzando la interrogante de la ausencia de «primeras potencias» deportivas-, pero se muestra muy inquieto sobre las repercusiones en la conferencia de Madrid, hasta el extremo de considerar el deseo de aplazarla hasta que «las aguas vuelvan a su cauce». Por este motivo habría solicitado al comandante supremo de la OTAN su opinión al respecto. La postura española sería aplazar la reunión de apertura hasta la primavera de 1981, a fin de «salvar lo esencial y tener alguna posibilidad de éxito».

En la entrevista se trató también con toda probabilidad de la reacción del Gobierno del presidente Suárez ante la'nvasión soviética de Afganistán, así como de la entrevista mantenida por éste con el presidente norteamericano, Jimmy Carter. Igualmente parece lógico suponer que se realizaron valoraciones sobre la distinta valoración que de la acción militar soviética realizan los distintos países miembros de la Alianza Atlántica.

Posición del palacio de Santa Cruz

Por su parte, el director de la Oficina de Información Diplomática, Antonio Oyarzábal, declaró ayer a EL PAIS que el Gobierno español mantiene la fecha del 22 de noviembre próximo como el día formal para la apertura de la Conferencia de Madrid sobre la Seguridad y la Cooperación en Europa. El portavoz de Asuntos Exteriores añadió, no obstante, que el Gobierno español «no considera la celebración de la conferencia como un fin en sí mismo, sino como el resultado de la distensión». Añadió que España no desearía mantener las fechas de dicha convocatoria al margen del desarrollo de la distensión y por la fuerza y que, a pesar de que considera la reunión de Madrid como un foro de ilusión y de esperanza para la seguridad europea, España estaría dispuesta a cancelar o suspender la convocatoria si las circunstancias lo exigen. «Esta posibilidad no nos ha sido sugerida por nadie hasta el momento», concluyó el portavoz.