Congelados y recortados los sueldos a los ex ministros

Los socialistas consiguieron ayer, después de que UCD derrotase sistemáticamente todas las enmiendas de la izquierda a los Presupuestos del Estado sobre asignaciones a funcionarios, introducir dos párrafos en el artículo 13, por los que se congela el sueldo de los ex ministros y se recorta la posibilidad de percibirlo en el futuro.Parece que la señal de alerta la dio el propio Suárez mientras escuchaba al socialista Esteban Granados defender una doble enmienda frente a las asignaciones de los ex ministros. Idas y venidas de los responsables de los grupos parlamentarios concluyeron con una suspensión del Pleno durante unos minutos, en los que los centristas pactaron con los socialistas la admisión de sus enmiendas.

La sorpresa, relativa, surgió cuando UCD se abstuvo en la votación y las enmiendas prosperaron por 140 votos favorables y 151 abstenciones, entre las que hay que contabilizar las de Coalición Democrática.

La iniciativa socialista consiguio que el partido del Gobierno se comprometiese públicamente a presentar en breve un proyecto de ley de incompatibilidades, mientras su portavoz, Antonio Giménez Blanco, insistía en que sin la abstención de su grupo nunca hubiesen prosperado las pretensiones socialistas. Las enmiendas incorporadas suponen que desde ahora no se efectuará incremento alguno en los haberes pasivos de los ex ministros y que desde el 1 de enero de 1980 estos haberes serán incompatibles «cuando el ex ministro o asimilado perciba remuneraciones de cualquier clase de las administraciones públicas».