"La Alemania del Este es un socialismo feudal prusiano"
En 1976 el escritor y cantautor de la RDA Wolf Biermann fue privado de la nacionalidad germano-oriental por decisión del Gobierno de Berlín Este y expulsado del Estado. Biermann, militante del PCE y residente en Hamburgo, había abandonado Alemania Federal en 1953 para integrarse en la sociedad socialista de la RDA. Con él conversó nuestro corresponsal en Bonn, Julio Sierra.Pregunta. Durante veintitrés años ha sido usted ciudadano de un país en el ue se ha establecido un sistema de socialismo «real», según la terminología del Este europeo. ¿Qué balance podría hacerse, desde su perspectiva, e los treinta años de existencia de a Alemania socialista?.
Respuesta. La República Dernocrática Alemana no ha llegado a ser ni república, ni democrática, ni alemana. El sistema vigente podría calificarse de socialismo feudal prusiano. A pesar de ello, la RDA es un país que, para un comunista, encarna un signo de esperanza porque en ella la sociedad ha dejado de ser capitalista, aunque aún no haya alcanzado el socialismo
P. ¿Qué le falta para llegar a este objetivo?
R. La propiedad de los bienes de producción por el Estado debe convertirse en propiedad real de estos bienes por el pueblo. La RDA debe convertirse en una democracia popular real, abandonando la dictadura de la burocracia política. Es decir, los trabajadores deben convertirse en los verdaderos dueños de las fábricas. Desde la primavera de Praga de 1968 sabemos que esto no es un sueño irreal. Pienso que en todos los países que se llaman socialistas y no lo son en realidad debe producirse una revolución socialista semejante a la que se produjo en Checoslovaquia en 1968. La realidad de que la revolución de Praga fue ahogada no es, a mi modo de ver, ninguna prueba de que el camino era inviable.
P. De todas formas, en la actual situación mundial, que algunos ven abocada a una nueva guerra fría, ¿no parece aventurado pensar en una vía al socialismo similar a la de Checoslovaquia en el año 1968?
R. Pienso que el neoestalinismo es una condición fundamental para que se produzca una nueva guerra fría. Estoy convencido de que el mejor medio contra la guerra fría, que buscan los países capitalistas, es un desarrollo realmente socialista en los paises socialistas.
P. Los dos Estados alemanes parecen no haber encontrado aún su propia identidad nacional. La RDA incluso magnifica a los generales prusianos que construyeron el imperio del kaiser...
R. Hay que tener en cuenta que la RDA es Prusia, es un país prusiano. Y por esta razón, no es extraño que se cuide en él la tradición prusiana. Para un comunista esto es chocante, y por ello no me produce satisfacción alguna. Las dos mitades de Alemania tienen la tendencia nefasta de unírse en este punto. El Occidente se convierte cada vez más en un Estado policíaco en el que los derechos democráticos van desmontándose progresivamente, y el Este imita cada vez más claramente el bienestar de la sociedad alemana occidental, con directrices claramente burguesas.
P. ¿Qué perspectivas otorga a la reunificación alemana?
R. Opino que una política que apunta básicamente hacia la reunificación no es realista ni socialista. En el pasado hicimos de este problema una cuestión central para Alemania. Durante un tiempo dejamos a las fuerzas reaccionarias que se expresasen a su gusto sobre la reunificación alemana. Cuando este sector habla de reunificación entiende bajo tal concepto la recuperación de la RDA para la sociedad capitalista. Sobre este punto hemos escrito ya bastante. Opino que tenemos que buscar una alternativa socialista que se someta a discusión pública, porque el pueblo no puede quedar al margen del problema de la división del pueblo alemán. La gente no tiene por qué sentirse jamás dividida por el muro, y sobre todo los ciudadanos de la RDA, por el hecho de que estén incomunicados.
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