Empresas asturianas amenazan con no cotizar a la SS

Las empresas asturianas agrupadas en la asociación patronal FADE pueden dejar de cotizar este mismo mes a la Seguridad Social y suspender el pago de los impuestos fiscales y municipales, manifestó a EL PAIS Arturo Corte Mier, presidente de la citada asociación, a la que pertenecen empresas con plantillas comprendidas entre los. 2.000 y 2.600 trabajadores. Corte Mier evaluó en unos mil millones de pesetas la cantidad que dejaría de pagar este mes la patronal asturiana por el incumplimiento de sus compromisos con la Administración, como consecuencia del «arbitrario y difícil tratamiento que se observa en la reestructuración, regulaciones y rotaciones de plantillas que desean llevar a cabo empresas que aún tienen salvación».Corte Mier afirma que las delegaciones provinciales de Trabajo solamente acceden a flexibilizar las plantillas cuando lo aconsejan los informes de las centrales sindicales y los comités de empresa. «Exigimos», agregó, «que el informe de las corporaciones empresariales sea preceptivo para la regulación, rotación y reestructuración de las plantillas. Eso no quiere decir que vetemos los informes de las centrales sindicales; pedimos, simplemente ser escuchados por la Delegación de Trabajo como ellos.»

La grave crisis de las empresas asturianas se debe a la falta de demanda, y muchas de ellas se encuentran al borde de la quiebra, si no se adoptan medidas urgentes de salvación, medidas que según Corte Mier ignoran las centrales sindicales, obsesionadas con mantener de momento los puestos de trabajo, sin la menor preocupación previsora ante un futuro incierto. «Nosotros», añadió, «no podemos subirnos a los gasómetros ni protagonizar encierros, pero hemos emplazado seriamente a la Administración para que tenga en cuenta nuestra opinión en la reestructuración de las plántillas. Si no se nos escucha, no estamos drispuestos a cumplir nuestros compromisos.»

La FADE realiza actualmente, una encuesta entre sus empresas asociadas para precisar el alcance de la crisis económica en Asturias y concretar un programa de acciones de presión ante la Administración para conseguir sus objetivos.