James Hadley Chase: "La violencia como estilo"

En un artículo publicado en 1944 en la revista Horizon, Arthur Blair (1903-1950), más conocido por su seudónimo literario George Orwell, tras resumir la violenta intriga de No Orchids for Miss Blandish, escribe: «Hay que fijarse en otros aspectos para captar todo lo implicado en este libro. Por lo pronto, su argumento tiene mucho parecido con la novela de William Faulkner Santuario. En segundo lugar, no es, como podría esperarse, obra de un basto mercenario de las letras, sino una novela bien escrita en la que apenas sobran palabras ni hay en ella notas discordantes. En tercer lugar, todo el libro, tanto el récit como el diálogo, está escrito en norteamericano. El autor, un inglés que nunca ha vivido en Estados Unidos -ni siquiera ha estado-, parece haber hecho una transferencia mental y total a los bajos fondos norteamericanos. Y cuarto, se han vendido del libro, según dicen sus editores, nada menos que un millón de ejemplares.»Publicada originalmente en 1939, No Orchidsfor Miss Blandish es la primera novela del escritor inglés René Raymond (1906), que ha publicado más de cincuenta obras bajo los seudónimos James L. Docherty, Raymond Marshall, Ambrose Grant y, el más conocido, James Hadley Chase. Dentro de una amplia gama que va de la estricta novela negra a la de espionaje pasando por la de aventuras, la gran mayoría de sus obras no son buenas. Entre ellas sobresalen, por su interés, debido al refinado sadismo de sus intrigas, la falta de escrúpulos de sus personajes y la violencia de sus páginas, las que firma como James Hadley Chase y se desarrollan en Paradise City, la imaginaria ciudad de la costa de Florida creada por el autor.

«Al haber tomado -continúa Orwell en el artículo citado- de modelo Santuario, de Faulkner Chase sólo se dejó llevar por el argumento; la atmósfera mental de ambos libros es distinta. En verdad, Chase deriva de otras fuentes, y el hecho de ese préstamo sólo es simbólico. Lo que simboliza es la vulgarización de ideas que acelera y es tan corriente en la gran época de la imprenta. Chase ha sido llamado «el Faulkner de las masas» pero sería más exacto llamarle «el Calyle» para las masas. Es un es critor popular -hay muchos en Norteamérica, pero aún son raros en Inglaterra- que se ha hecho famoso con lo que ahora se llama «realismo», según la doctrina de que el poder es el que tiene razón.

Tanto si No Orchids for Miss Blandish está plagiada de la obra de Faulkner, como al parecer lo está, como si Blondes Requiem es otro plagio de las obras de Raymond Chandler y Dashiell Hammett, como llegó a reconocer el propio René Raymond, la realidad es que en todas sus novelas, sean buenas, malas o regulares, hay una similar concepción del mundo en que aparece claramente repartido entre los que tienen dinero y los que no lo tienen y siempre están dispuestos a realizar cualquier tipo de acción violenta y fuera de la ley para conseguirlo. Otra de las características de sus obras es que, en el curso de la acción, mueren de forma violenta y generalmente también tortuosa todos, salvo los profesionales de tipo medio menos deshonestos y algún personaje secundario.

Deficientes traducciones

Indudablemente, René Raymond no es un escritor de la talla de Chandler o MacDonald, y mucho menos en las traducciones sudamericanas, puestas a punto por anónimos correctores de estilo, en que acostumbran a publicarse en España, en las cuales se tergiversa, incluso el título, pero es autor que se lee con rapidez, muestra una desesperada y personal visión del mundo y tiene algunos rasgos interesantes, entre los que destaca un peculiar humor negro.Algunas de las mejores novelas de René Raymond han servido de punto de partida a ambiciosas películas que han superado a los respectivos originales en todos los sentidos. No sólo Eva (1962) es mucho mejor que su homónima literaria y una de las grandes obras de Joseph Losey, sino que La banda de los Grisson (1971) es una clara superación de No Orchidsfor Miss Blandish y una de las obras maestras de Robert Aldrich.