La RDA prohíbe la entrada al abogado español del disidente Havemann

Las autoridades de la República Democrática Alemana (RDA) han prohibido la entrada en el país del abogado socialista español Enrique Gimbernat, elegido por el disidente alemán Robert Havemann como su defensor en el proceso que se ha seguido contra él por «fraude de divisas» y ha concluido con una condena de multa de 10.000 marcos.

Gimbernat forma parte de un colectivo de seis abogados españoles que han tomado a su cargo la defensa de Havemann, «un proceso político», según palabras del propio disidente.Durante la primera sesión del juicio, la pasada semana, las autoridades de la RDA no dejaron entrar en la sala a Gimbernat por no tener visado para el distrito de Francfurt-Oder, donde se celebró el proceso. El martes último, a pesar de que la embajada alemana del este en Madrid había dado garantías al abogado español de que al menos se le permitiría asistir al juicio, en su segunda parte, en calidad de observador, Gimbernat no pudo siquiera entrar en Berlín Este y un miembro de la policía de la RDA le dijo en la frontera que era persona non grata en el país por haber infringido la ley Penal.

El defensor español afirmó ayer en el transcurso de un rueda de prensa en Madrid, que lo que pretenden las autoridades de la RDA es sencillamente «evitar que Havemann pueda tener un defensor». El propio disidente ha rechazado abogados alemanes porque «perjudicaría su futuro o bien no defenderían mis intereses». (El abogado alemán Bergha, antiguo combatiente en España, fue expulsado del Colegio de Abogados de la RDA por defender a Havemann.)

Havemann está acusado de tráfico de divisas (véase EL PAIS de 13 de junio) de acuerdo con los derechos de autor que recibe de la publicación de sus obras en el extranjero (están prohibidas en la RDA).

Gimbernat, que habló con Havemann la semana pasada antes de la primera sesión del juicio, afirma que el disidente, especialista en fotosíntesis, antiguo resistente anti-nazi, confesó que «no abandonaría la RDA, porque, primero, no podría volver, y segundo, porque es necesaria la resistencia interna».

En opinión del abogado español, los engaños de las autoridades alemanas del Este son evidentes para desvirtuar el verdadero carácter político del proceso y evitar la defensa. Se acusa a Havemann de un delito de obtener divisas extranjeras, cuando importantes científicos de la RDA publican también en el extranjero, pero obras sin matiz político. Asimismo, se le prohibe su entrada al juicio, por no tener el visado que se le negó la semana pasada.