Armas para arrasar varias veces la vida de la tierra

De acuerdo con los tratados SALT II que han firmado los presidentes Carter y Brejnev en Viena, los soviéticos tendrán que destruir 250 unidades de misiles intercontinentales. El resto de lo acordado supone -tan sólo o tanto, según se mire- una reducción cuantitativa y cualitativa de la carrera de armamentos.En el terreno cuantitativo, ambas partes limitarán los lanzadores de armas nucleares a un total de 2.250. Dentro de esta cifra, soviéticos y norteamericanos tendrán derecho a un máximo de 1.320 para el conjunto de lanzadores múltiples: misiles íntercontinentales con base en tierra, misiles submarinos de múltiples cabezas nucleares, bombarderos pesados con «misiles de crucero» y misiles balísticos aerotransportados.

Dentro del límite precedente (1.320) se establece un máximo de 1.200 unidades de misiles balísticos con cabezas múltiples.

Finalmente, se establece un máximo de 820 misiles intercontinentales de cabezas nucleares múltiples con base en tierra.

En cuanto a la reducción cualitativa, ninguna de las dos partes podrá aumentar el volumen y la potencia de sus misiles balísticos. La URSS y EEUU se comprometen a congelar la carga nuclear de cada una de las cabezas múltiples de los misiles. Ambas partes quedan autorizadas a experiementar, en el plazo de la duración del tratado, con un solo tipo de misil, el ICBM. El MX, en versión americana, y el SS-19, para los soviéticos.

Las SALT II limitan, asimismo, la cantidad de misiles que podrá llevar una lanzadera volante, caso del B-52, con un alcance superior a los seiscientos kilómetros. Los bombarderos encargados de llevar estas armas no podrán portar más de veintiocho misíles.

EEUU y la URSS han declarado el siguiente número de armas estratégicas ofensivas: lanzamisiles en tierra móviles (1.054 y 1.398, primera cifra EEUU, y segunda, URSS). En tierra fijos, igual cifra. Lanzamisiles de cabezas múltiples (550 y 608). Lanzamisiles submarinos (656 y 950). Misiles con cabezas múltiples transportadas (496 y 144). Bombarderos pesados (573 y 156).

Los arsenales nucleares de Estados Unidos y de la Unión Soviética contienen armamento atómico con una potencia explosiva de 50.000 megatoneladas, equivalente a quince toneladas por habitante del planeta, lo que es tanto como decir que, en caso de conflicto bélico, el arsenal atómico existente puede arrasar varias veces la vida de la Tierra.