El Gobierno de Somoza denuncia una invasión sandinista desde Costa Rica

El Gobierno de Nicaragua, en una declaración formulada a la una de la tarde de ayer (ocho de la noche, hora de Madrid), denunció la invasión de su territorio nacional por unas trescientas personas armadas, miembros del Frente Sandinista de Liberación, que procedían de Costa Rica. La situación, calificada de «extremadamente grave» por el ministro nicaragüense de Asuntos Exteriores, Julio César Quintana, ha motivado la urgente convocatoria del órgano consultivo de la Organización de Estados Americanos y la invocación del tratado interamericano de defensa recíproca, que prevé incluso la ayuda militar en casos similares.

Lo que el ministro Quintana calificó de «agresión» se inició en las primeras horas de la mañana de ayer al sur de Nicaragua, en la frontera con Costa Rica. Por cinco puntos diferentes de la línea divisoria entraron, según la información gubernamental, otros tantos grupos de sandinistas, fuertemente armados. En la bahía de Salinas, en el Pacífico, los guerrilleros atacaron con lanzagranadas y morteros a un guardacostas nicaragüense.La ciudad de Rivas, la más importante antes del puesto fronterizo de Peñas Blancas, fue igualmente atacada con morteros desde territorio costarricense, según la información suministrada por el ministro Quintana. En sus proximidades, un grupo de sandinistas secuestró a dos miembros de la misión permanente de observadores que la Organización de Estados Americanos tiene destacada en la zona. Se trata de Oswaldo Vallejo y Eduardo Colón, de nacionalidad ecuatoriana. En esa acción resultó muerto el capitán Manuel Sacasa, de la Guardia Nacional, que formaba parte de la escolta militar de los observadores.

Dos aviones desconocidos

El ministro nicaragüense aclaró que la presencia de dos aviones desconocidos sobre el espacio aéreo nicaragüense podría tener que ver con la invasión producida ayer. Todo indica que los aviones no lograron aterrizar. En uno de ellos, un DC-3, pueden viajar, con su armamento completo, alrededor de sesenta hombres.

La declaración hecha por el ministro nicaragüense de relaciones exteriores fue recogida por periodistas extranjeros presentes en Nicaragua, que se mostraron sorprendidos por el tono extremadamente dramático usado por el funcionario. El señor Quintana aludió en más de una ocasión al hecho de que los sucesos de la frontera con Costa Rica «ponían en peligro no solamente la paz en Centroamérica, sino la del continente», y que la invasión desde Costa Rica podría suponer el inicio de una guerra civil en Nicaragua. El ministro descartó un conflicto bélico con Costa Rica, asegurando que Nicaragua «nunca atentaría contra la integridad territorial de su vecino».

Combates en la frontera

Noticias procedentes de Rivas aseguran que hacia esa zona se ha concentrado la mayor parte de los sandinistas que atravesaron esta mañana la frontera. Los combates parecen ser intensos, aunque no se ha informado del número de bajas en ambos bandos.

En estos momentos, el Frente Amplio Opositor y el Frente Patriótico Nacional, de Nicaragua, están trabajando en la elaboración de dos documentos, uno sobre el programa de un futuro Gobierno de unidad nacional y otro sobre la integración de dicho Gobierno. Las diferencias de criterios entre las dos organizaciones parecen más formales que conceptuales, por lo que no es aventurado esperar un arreglo próximo.