Fidel Castro visita hoy México, invitado por López Portillo

Rodeado de imponentes medidas de seguridad, el presidente de Cuba, Fidel Castro, inicia hoy una visita de treinta horas a México, invitado por su colega José López Portillo.

El anuncio de la visita de Fidel Castro a México, hecho con una anticipación de apenas dos días, produjo singular sorpresa en los medios diplomáticos del continente americano. Inmediatamente comenzaron las especulaciones sobre las razones del inesperado viaje y sobre las consecuencias que de él podrán derivarse.Algunos observadores señalan que el principal interés de Castro al acercarse a México es económico. Cuba necesita petróleo, en mejores condiciones de precio que el soviético, enormemente encarecido por los fletes. Se piensa que Fidel Castro podría proponer a José López Portillo una operación triangular similar a la que existe entre Venezuela, Cuba y, España, mediante la cual parte de los crudos que nuestro país compra a Venezuela se quedan en Cuba, mientras otra parte del petróleo que envía la URSS a Cuba es descargado en España.

Otras tesis adjudican un mayor significado político que económico a la visita de Castro a México. El papel de este país en el concierto mundial ha aumentado de manera considerable en los últimos tiempos, sobre todo a partir del descubrimiento de las enormes reservas petrolíferas de que dispone. El presidente López Portillo, apoyado en estas circunstancias, se ha permitido tratar con inusitada firmeza al mismísimo Jimmy Carter y ha sido cortejado por numerosos gobernantes de países europeos.

Hay muchos otros temas que con toda seguridad serán tratados en las conversaciones de Fidel Castro con José López Portillo. La Conferencia Internacional de Países No Alineados, que se celebrará en septiembre en La Habana, y a la que México asistirá como observador, o el Tratado de No Proliferación Nuclear en América Latina, suscrito a instancias mexicanas, en 1967, por la mayoría de los países del Continente y al que Cuba se ha opuesto enérgicamente, hasta ahora. De cualquier forma, la visita de Castro a México servirá para corroborar las buenas relaciones que, desde siempre, han mantenido los dos países. México fue el único país miembro de la Organización de Estados Americanos que no rompió relaciones diplomáticas con Cuba tras el triunfo de la revolución castrista en 1959. Los presidentes López Mateos y Luis Echeverría habían invitado en varias ocasiones a Fidel Castro para que visitase México, e incluso el propio Echeverría viajó a La Habana en abril de 1976.

Desde el punto de vista sentimental, Castro guarda muchos recuerdos mexicanos. En México estuvo encarcelado algunos meses, tras anunciar la preparación de un plan para derrocar a Fulgencio Batista. En México conoció a Ernesto Che Guevara. De México, en la Costa Tuxpán, zarpó el 26 de noviembre de 1956 el yate Granma, que trasladó a Cuba a los pioneros de la revolución. De aquel grupo de 82 expedicionarios, solamente doce sobrevivieron.