Gran Bretaña mantiene su veto a la creación de un régimen pesquero para la CEE

Economía, finanzas y pesca constituyeron la trilogía de la jornada comunitaria en Bruselas, con reuniones ministeriales dedicadas al análisis de la situación socioeconómica de la CEE, la puesta en marcha del Sistema Monetario, Europeo y la búsqueda, sin resultados positivos, de un compromiso para la creación de un Mercado Común de la Pesca.Los nueve de Economía y Finanzas, presididos por el ministro francés del ramo, René Monory, deliberaron brevemente -dos horas- en torno a la situación de la coyuntura económica en la CEE. Satisfacción moderada por el crecimiento económico del PIB en 1978 (2,8 %) y por las previsiones para 1979 (3,5 Preocupación por una reactivación de la inflación, debida, en parte a la incertidumbre internacional. Necesidad de controlar la masa salarial y oscilación del paro, que disminuye en la RF de Alemania, pero aumenta en Francia. Confirmación de una balanza de pagos equilibrada, en general, entre los nueve de la CEE, e inquietud por el enorme superávit de la balanza de pagos japonesa y el crecimiento de la inflación en Estados Unidos. Los ministros de Economía y Finanzas hablaron también de la necesidad de una rápida aplicación de los principios directivos del Sistema Monetario Europeo, retrasados por diferencias entre alemanes y franceses a propósito de los mecanismos agrimonetarios del Mercado Común agrícola. Unas discrepancias que deben despejar los ministros de Agricultura o, en su defecto, los jefes de Estado o de Gobierno del Mercado Común, que el 12 y 13 de marzo se reunirán en París en su primer Consejo Europeo del año, bajo la presidencia de Valery Giscard d'Estaing.

Si en Economía y Finanzas la discusión fue breve, sobre todo debido a la falta de temas sobre el tapete que exigieran una decisión, en pesca la sesión fue más larga y problemática. No se realizó ningún avance en dirección hacia la creación de un Mercado Común de la Pesca. Las diferencias siguen siendo las que prevalecen desde hace dos años: oposición de los británicos a las propuestas de la Comisión Europea -apoyadas por el resto de Estados de la CEE- en materia de límites nacionales de la zona de pesca y cupos de capturas. Situación que continúa bloqueada y que no evolucionará hasta pasadas las nuevas elecciones generales en Gran Bretaña, que condiciona las relaciones exteriores pesqueras de la CEE.