_
_
_
_
Debate constitucional en el Senado

EI idioma oficial del Estado será el "castellano o el español"

La Comisión Constitucional del Senado aprobó en la sesión de ayer por la mañana sendas modificaciones del proyecto de Constitución, por las que el idioma oficial del Estado pasa a denominarse «castellano o español» -artículo 3.º- y, la bandera «consta» de tres franjas«roja, amarilla y roja» -artículo 4.º-, con lo que desaparece del ordenamiento constitucional la denominación «gualda» para el color de la franja intermedia. Las dos modificaciones eran enmiendas del escritor Camilo José Cela, y contaron con la oposición de los socialistas, la primera, y la práctica unanimidad de la Comisión, la segunda.

Más información
"Los colores de la bandera española son rojo, amarillo y rojo"
Ratificado de nuevo el término "pluralismo político"

La enmienda del señor Cela proponía, en principio, además de que se añadiese «o español» en el apartado 1 del artículo 3.º, que se dijese también que la lengua oficial es también la «común de todos los españoles», palabras que luego fueron retiradas. En defensa de su propuesta, el señor Cela argumentó que «castellano» y «español» son rigurosamente sinónimos, y que la segunda denominación en cierto modo engloba a la primera y es algo más que el castellano en sus orígenes.Semejantes a la enmienda del señor Cela eran las presentadas por UCD, Agrupación. Independiente y Justino de Azcárate, si bien este último pedía, además, que se dijese que, salvo lo que se disponga en leyes especiales, nadie podrá ser obligado a conocer o usar una lengua regional, con lo que el artículo hubiera quedado exactamente igual que el correspondiente de la Constitución de 1931. Todas estas enmiendas fueron retiradas en favor de la del señor Cela, quien recibió también el apoyo expreso de Progresistas y Socialistas Independientes.

Defendiendo la necesidad de decir «español», el portavoz de UCD, Luis Miguel Enciso, argumentó que «castellano» suena más a la lengua primitiva, y que desde la unidad de España, en el siglo XV, se llama españoles a sus habitantes y español a su idioma.

En contra de la modificación, el portavoz de la Entesa dels Catalans, Josep Benet, manifestó que añadir «español» no resuelve ningún problema político, sino que el añadido es innecesario y conflictivo, e irritará incluso a los castellanos, que verán cómo se les despoja del nombre de la lengua que crearon. Dijo también que la enmienda gustaría a los separatistas, que oponen lo español a lo catalán o a lo vasco. A pesar de estos argumentos, la Entesa se abstuvo en la votación, dejando solos a los socialistas.También propuso enmiendas sobre este apartado el senador catalán Rosend Audet, que defendió conjuntamente las presentadas a todo el artículo. Según el señor Audet, no se puede obligar a hablar castellano a quien no lo tiene como lengua materna, y tampoco el idioma del Estado tiene por qué ser oficial en las comunidades autónomas.

Los senadores vascos pidieron entre otras cosas, que se suprimiese el deber de conocer el castellano, en base a que resultaría atentatorio contra los derechos humanos para quienes no lo tienen como lengua materna. Por su parte, Fidel Carazo pidió que se dijese únicamente idioma «español», y defendió su postura con un discurso de tan en cendido corte españolista que el senador vasco Manuel de Irujo desde los bancos de los espectadores, le apostilló con expresiones sarcásticas, tales como «esto pare cen unas Cortes del siglo XVII», lo que provocó repetidas protestas del señor Carazo.

El apartado 2 del mismo artículo fue aprobado con una sola modificación estilística, propuesta por Progresistas y Socialistas Independientes. Este párrafo, referente a la cooficialidad de las lenguas no castellanas en las respectivas comunidades autónomas, fue enmendado por la Entesa catalana, con el apoyo de los vascos.

La enmienda catalana, presen tada por el senador Francisco Candel, pedía que los poderes públicos contrajesen la obligación de facilitar los medios necesarios para la enseñanza gratuita de las lenguas regionales, donde éstas sean cooficiales.

El portavoz de la Entesa, señor Benet, dijo que rechazar esta enmienda supondría condenar a la discriminación a los inmigrados y favorecer la formación de dos comunidades distintas y posiblemente antagónicas. El portavoz del Grupo Vasco afirmó que el problema es el mismo en Euskadi.

Los portavoces de UCD y del Grupo Socialista, que votaron contra la enmienda, argumentaron que en leyes posteriores se pueden desarrollar las garantías pedidas, y de parecida opinión fue el señor Sánchez Agesta.

Finalmente, fue aprobado sin variación el apartado 3, que se refiere a la riqueza linguística de Espana como patrimonio cultural.

Tu suscripción se está usando en otro dispositivo

¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?

Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.

¿Por qué estás viendo esto?

Flecha

Tu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.

Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.

En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.

Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.

Archivado En

Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
_
_