La Junta militar chilena destituye al comandante en jefe de la fuerza aérea
La Junta Militar chilena destituyó ayer al general Gustavo Leigh de sus cargos como miembro de la Junta y como comandante en jefe de la fuerza aérea. Para reemplazarle designó al general Fernando Mathei, que ocupa el cuarto lugar en el escalafón de las fuerzas aéreas de Chile, y que juró ayer sus nuevos cargos. En la comunicación, donde la autoridad suprema de Chile notificó la sustitución de Leigh Guzmán, se alude a que la medida fue adoptada por la Junta «por faltar (Gustavo Leigh) reiteradamente a los principios y postulados que insipiraron el movimiento del 11 de septiembre de 1973», fecha en que fue derrocado y muerto Salvador Allende.
La destitución del general Leigh, uno de los cuatro miembros de la Junta MIlitar chilena, añade un punto de gravedad a la crisis política que experimenta el país andino desde que la oposición interior y exterior a la dictadura militar se recrudeciera y desde que la presión internacional sobre el general Pinochet se intensificara, fundamentalmente a partir del plebiscito mediante el cual la cabeza de la Junta pretendió lograr un respaldo popular a su política, el pasado mes de enero. A esto se opuso el general destituido.Leigh, de 58 años, ocupó la agregaduría aérea de su país en Washington, fue director de la Escuela Nacional de Aeronáutica, condecorado con la medalla militar española al Mérito Aéreo y comandante en jefe de la fuerza aérea en 1973, año en el que se incorporó al movimiento que derrocó al presidente Salvador Allende, para pasar luego a representar a la fuerza aérea en el seno de la Junta Militar. Este organismo está compuesto por Pinochet y los también generales César Mendoza, del Cuerpo de Carabineros, y el almirante José Toribio Merino.
El representante de la fuerza aérea en la Junta Militar, ahora destituido, que ha sido miembro fundador de la Liga Mundial Anticomunista, había manifestado puntos de vista enfrentados directamente a los esgrimidos por el general Pinochet, además de en temas relacionados con el plebiscito de enero, en otros relativos al propio papel de la Junta Militar.
Alejamiento progresivo
Según puso de relleve el mismo Augusto Pinochet poco después de la ceremonia de juramento del nuevo cuadrunviro, Fernando Mathei -hasta ayer ministro de Salud Pública- «el general Leigh Guzmán venía demostrando desde hace tiempo, con diversos hechos, un progresivo alejamiento de los postulados del Gobierno militar». Aunque no se citó explícitamente, las palabras de Augusto Pinochet parecen referirse, además, a una entrevista publicada el 18 de julio entre el general destituido y un periodista del diario italiano Corriere della Sera, en la cual Gustavo Leigh decía, entre otras cosas, que la Junta Militar no había marcado ningún calendario político, lo cual ponía en peligro su propia subsistencia política.En la entrevista, el general cesado señalaba que calculaba en cinco años el plazo de devolución del poder a los civiles en Chile, tras de cuyos anos serian destinados a la recomposición del censo electoral, destruído tras el golpe de Estado del 11 de septiembre de 1973. En sus declaraciones, publicadas el martes de la semana pasada, Gustavo Leigh proponía un programa de cuatro puntos que incluía un estatuto de regulación de los partidos políticos, la restauración ya citada de los censos electorales, una ley general reguladora de elecciones libres y un texto constitucional a someter a referéndum y en cuya elaboración participaran personalidades civiles junto a las autoridades militares, ya que, según sus propias palabras al diario italiano, «los chilenos, que tenemos una dilatada tradición de libertades democráticas, no podemos permanecer hasta el infinito en la negación de la libertad».
Dentro de sus manifestaciones -a juicio de los observadores la gota que culminaba el vaso de la paciencia de Augusto Pinochet respecto a la estadía del general del Aire en la Junta Militar- Leigh reafirmaba su oposición al plebiscito de enero pasado y se refirió a que si averiguara que el caso Letelier responsabiliza a la Junta Militar, reconsíderaría su posición dentro de la propia Junta.
Tu suscripción se está usando en otro dispositivo
¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?
Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.
FlechaTu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.
En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.