Los diputados canarios de UCD negociaron con el Gobierno mejoras económicas en el archipiélago

La polémica levantada por la ratificación del acuerdo pesquero hispano-marroquí, que se someterá hoy al Pleno del Congreso de Diputados, provocó ayer una intensa actividad por parte de los diputados canarios de Unión de Centro Democrático (UCD), quienes negociaron con el Gobierno contrapartidas económicas para el archipiélago como condición para no romper hoy la disciplina de voto.

Los diputados canarios de UCD estiman que las condiciones actuales del acuerdo pesquero deben ser reforzadas con medidas unilaterales del Gobierno español, destinadas a mejorar el equipamiento de la flota pesquera canaria y a aumentar las inversiones estatales en las islas.

Con el ministro de Transportes

Con este fin, los parlamentarios se reunieron a última hora de la tarde con el ministro de Transportes y Comunicaciones, José Lladó, y con otros dirigentes de la UCD. Según declaró a EL PAIS el vicepresidente para Asuntos Políticos, Fernando Abril Martorell, el Gobierno contempla con interés las peticiones de sus diputados, dado que le preocupa la situación deprimida de las islas Canarias, pero cualquier medida en este sentido estará condicionada por los problemas presupuestarios estatales.Para el Pleno de esta tarde existen dos enmiendas a la totalidad: la ya conocida del grupo socialista, y otra más del PCE. Si se discuten las dos, ello dará más oportunidades a UCD y al Gobierno de exponer sus respectivos argumentos. Uno de los turnos de UCD será consumido, posiblemente, por Víctor Moro, a fin de que pueda defenderse de las acusaciones socialistas.

Por su parte, el PSOE, que calificó el acuerdo hispano-marroquí como «operación empresarial con indicios de corrupción política», va a preparar una primera intervención muy técnica y ajustada al tema, seguida de otras que dependerán del desarrollo de los debates. Fuentes dignas de crédito afirman que la documentación en poder del PSOE es mucho mayor de lo que hasta ahora se conoce. Asimismo, el grupo socialista se plantea también la solicitud de cese del presidente de la Comisión de Asuntos Exteriores, Ignacio Camuñas, por considerar que desconvocó unilateralmente una reunión de la comisión prevista para ayer.