Lindsay Kemp: "Mi teatro tiene el peligro del circo y la pasión del «rock»"
Esta noche se estrena en el teatro Martin la obra Flowers (una pantomima para Jean Genet), por la compañía inglesa Lindsay Kemp. Este espectáculo, dirigido por Lindsay Kemp, asistido por Celestino Coronado, se presentó en Barcelona y Palma de Mallorca en diciembre pasado, obteniendo un gran éxito. «Mi teatro da la misma sensación que el peligro del circo y la pasión del rock», declaró a EL PAIS el actor y director Lindsay Kemp.
«Una de las razones de nuestra presentación en España -declara Lindsay Kemp- es descorrer las cortinas y los velos que han estado ocultando el arte durante los últimos cuarenta años. Pienso que el teatro debe cambiar, igual que debe cambiar la vida, lo que para mí es lo mismo. El teatro, no sólo en España, sino en todo el mundo, se ha convertido en algo mediocre del renacimiento del nuevo teatro.»Su entendimiento del teatro puede estar definido en el montaje de Flowers, un espectáculo sin texto, donde se integran la música, el circo, el mimo, el cine y la danza. «Cuando estoy en escena me encuentro nervioso y preocupado. Debo dar la magia que el público me pide. Por las representaciones anteriores he descubierto que el público español es muy directo y espontáneo. En esta situación, más que el actor debe presentarse el artista, como una Isadora Duncan que se entrega al público y les eleva al cielo. El arte no se hace para el intelecto, sino para la parte emocional. El arte sale del corazón. Mi éxito es sólo un resultado de mi pasión, que es comunicada y compartida con el público.»
Lindsay Kemp considera que la palabra en el teatro es una limitación. «El teatro no empezó con la palabra. Las palabras son para los poetas como García Lorca, no para los artistas como Sarah Bernhardt, Duncan, Nikinsky, que tienen una comunicación más directa, de ser a ser. Mi lenguaje es universal. Todo lo que entrego a través de mi arte lo obtengo ahora mismo en España, del público, de Picasso, Miró y de mis antepasados espirituales: el Kabuki, el No japonés y, especialmente, de Antonio Artaud. Yo mismo y los actores nos convertimos en atletas del espíritu. Nuestro montaje es más que teatro de la crueldad. Mi teatro da la misma sensación que el peligro del circo y la pasión del rock.»
La Lindsay Kemp Company es un grupo que no encaja en los términos habituales de teatro experimental o comercial. «Mi compañía no entra dentro de ninguna categoría. Nureyev me considera uno de los más grandes artistas del mundo, pero el Gobierno inglés no aporta ayudas económicas y cree que me paso. No soy británico, soy poeta, y eso es universal. Como Chaplin, soy incomprendido y mal interpretado con mucha frecuencia. De momento, mi hogar es España, que me está dando la energía que necesito.»
La obra Flowers refleja el espíritu de la novela Notre Dame des Fleurs, de Jean Genet. «Un gran amigo de Genet, el novelista Truman Capote, dijo que no había cogido nada de Genet, sino que lo había absorbido. Todo mi trabajo es una unión total. Soy un artista creador, no un artista que interpreta. Flowers está dedicada a Genet, pero la obra es tanto Genet como Kemp. Genet me indicó un camino, es mi influencia.»
«Toda la sociedad -añade- se encuentra reflejada en Flowers, no sólo los grupos marginados. La obra es como un espejo colocado frente a la sociedad y donde ésta se refleja. El público celebra conmigo la libertad del individuo. »
La obra permanecerá en cartel durante dos semanas. En principio se iba a representar en el teatro de la Comedia, pero uno de los socios no la autorizó. «Fui acusado de ser sacrílego. Dios es quien me ha dado mi arte y he dedicado mi vida a que este don no se pierda. Hay personas que tratan siempre de que el arte no ocurra, de mantener oculto el arte, que es como ocultar la vida y la verdad.» Una vez terminadas sus representaciones, la compañía emprende una gira por diversos países latinoamericanos. En la actualidad preparan nuevos montajes de Ubu rey, de Jarry, y El sueño de una noche de verano, de Shakespeare. Lindsay Kemp, escenógrafo de los recitales de David Bowie y Mick Jagger, piensa que a Shakespeare le han quitado la pasión, intelectualizando su teatro popular.
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