Estados Unidos vende aviones a Sudán

La decisión del Gobierno norteamericano de vender un escuadrón de aviones de caza a Sudán, un país que mantuvo hasta hace muy poco importantes vínculos con la Unión Soviética, es un indicio más del rápido «cambio de alianzas» que se está produciendo en el noreste de Africa.

Aunque está pendiente la aprobación del Congreso, la Administración Carter ha aceptado vender una docena de reactores de caza F-5E al Gobierno de Kartum, valorados en unos 75 millones de dólares. Esta es la primera venta de aviones de combate realizada por Estados Unidos a Sudán, que hace unos meses compro seis aparatos de carga del tipo Hércules C-130.La petición de Sudán para obtener de Washington aviones de caza que le permitan mejorar la cobertura aérea de su territorio fue apoyada por Egipto y Arabia Saudita, que forman un claro eje aliado frente a Etiopía y Libia quienes, a su vez, reciben ayuda militar de la URSS. Sudán expulsó el pasado mes de mayo a los asesores militares soviéticos, y sólo dos meses después Estados Unidos anunció su intención de contribuir a la defensa de Sudán.

El «puente aéreo» soviético a Etiopía

Hace escasamente dos semanas que el Departamento de Estado norteamericano denunció un «puente aéreo» establecido por la URSS para suministrar armas á Etiopía, que debe hacer frente a una rebelión en Eritrea y a un enfrentamiento con Somalia en el territorio del Ogaden. Somalia, otro antiguo aliado de la URSS que expulsó a los consejeros soviéticos recientemente, viene solicitando insistentemente la ayuda militar norteamericana. Por su parte, Sudán acusa a Etiopía y a Libia de apoyar movimientos antigubernamentales en el interior del país.Dada su especial situación geográfica, Sudán tiene intereses tanto en Oriente Próximo como en el Africa negra. La estrecha vinculación del régimen de Kartum con Arabia Saudita y Egipto provocó una reacción en contra de la venta de armas norteamericanas entre el poderoso lobby proisraelí del Congreso. La venta de los F-5 a Sudán podría ser el primer paso para operaciones similares con Egipto y también para la entrega de los más sofisticados aviones F-15 a Arabia Saudita. Los legisladores pro judíos aseguran que este material bélico podría ser utilizado contra Israel en caso de una nueva conflagración en Oriente Próximo.

Aumentan los suministros norteamericanos

Pese a sus repetidos avisos de que las grandes potencias no deben inmiscuirse en el continente africano, Estados Unidos está suministrando cada vez mayor número de armas a países del área. El año pasado Norteamérica vendió otro escuadrón de F-5 a Kenya. La ayuda a Sudán se completará próximamente con el suministro de nuevos equipos de radar.Pero la mayor incógnita reside todavía en si Washington se decidirá a apoyar abiertamente a Somalia y a enviar a este país material de guerra. Las recientes acusaciones hechas por Washington respecto de la presencia en Etiopía de asesores militares cubanos y del citado «puente aéreo» de suministro de armas soviéticas, podrían ser los primeros pasos para crear un estado de opinión en el legislativo y en la opinión pública que hiciera posible esta toma de postura. En este sentido, la venta de reactores de combate a Sudán sería otro paso previo destinado a establecer un diferente equilibrio militar en el «cuerno de Africa» y sus zonas aledañas.

Somalia pide ayuda a Irán

Entretanto, el presidente de Somalia, Mohamed Siad Barre ha iniciado ayer sus entrevistas con el sha Reza Pahlevi, tratando de conseguir apoyo en la lucha que los insurrectos somalíes sostienen contra Etiopía en el desierto de Ogaden.Barre llegó a Teherán ayer acompañado de su ministro de Asuntos Exteriores y de prominentes consejeros.