Pekín quiere mantener la iniciativa en sus relaciones con la CEE

Los chinos saben perfectamente que los rusos, haciendo gala de realpolitik, intentan ganar terreno y se preparan a un reconocimiento del Mercado Común, a través de la cobertura diplomática de un acuerdo comercial entre la CEE y el Comecón. '

Después de muchos meses de titubeos, Moscú se prepara para la ofensiva final. Se espera una visita del secretario general del Comecón a Bruselas, para septiembre u octubre, con objeto de acelerar las conversaciones con la CEE.Los chinos, que reconocieron a la CEE cuando la doctrina oficial de Moscú era todavía la de considerar y atacar al Mercado Común «como una extensión económica del imperialismo militar de la OTAN », no quieren llegar los últimos. Al contrario, se disponen a acelerar el proceso y dejar bien claro que, en relaciones con la «Europa de los monopolios», mantienen la iniciativa.

El marco jurídico del futuro acuerdo CEE/China, así como el CEE/Comecón, parte de un acuerdo-tipo preparado por los expertos comunitarios para relaciones comerciales con países de economía de Estado. Se trata, en realidad, de sustituir por un acuerdo comunitario los acuerdos bilaterales que cada uno de los países de la CEE tenían con terceros países de economía estatal.

Los actuales contactos «exploratorios» de una delegación de la comisión de las Comunidades Europeas en Pekín originan ciertas consideraciones en los medios comunitarios europeos. Pekín tendría prisa en negociar un acuerdo comercial con el Mercado Común. Se apunta la posibilidad de firmar dicho acuerdo antes de fin de año. En todo caso, los chinos intentarán vincularse a la CEE antes que los rusos.

Cronológicamente los chinos llevan ventaja a los rusos en lo que se refiere a contactos con la «Europa capitalista» del Mercado Común. Desde mayo de 1975, los chinos cuentan con un embajador acreditado ante la CEE.

Actualmente, la misión de la CEE en Pekín -dirigida por el director general de Relaciones Exteriores, el francés Roland de Kergorlay, que es también el «hombre» de la Comisión Europea para las negociaciones con España prepara el terreno para una ronda final que podría ser muy rápida.

El verdadero objetivo de Pekín, en sus relaciones con la CEE, sería, sobre todo, de orden político. Los dirigentes chinos apoyan la doctrina de que al estrechar lazos con la CEE «sostienen los esfuerzos de los países de Europa Occidental en su proceso de unificación y de batalla contra el hegemonismo».