La cançó valenciana, una expresión que nace

Hablar de una nova canço valenciana presenta una serie de problemas. El País Valenciano se ha situado siempre a horcajadas entre Castilla y Cataluña. La orientación hacia una u otra se ha debido muchas veces a reacciones coyunturales de la burguesía valenciana, que aún hoy llegan a manifestarse en agrias discusiones acerca de si el valenciano es o no es un dialecto del catalán. En las jóvenes generaciones, Barcelona actúa como imán cultural para los valencianos de la misma manera que Madrid sobre Burgos o Extremadura.

Se explica entonces por sí solo el hecho de que dos de los máximos representantes de la canço catalana, sean precisamente valencianos (considerando Valencia en adelante en un sentido más amplio que el de una demarcación provincial). Raimon y Ovidi Montllor, pueden ser considerados entonces como hijos pródigos, que de cuando en cuando vuelven, pero cuya influencia en el crecimiento de una canción específicamente valenciana puede considerarse muy a su pesar negativa. Esta constatación se afirma aún más cuando comprobamos la cantidad de cantantes que emigraron a Barcelona en busca de mejor ambiente y los que sin hacerlo seguían miméticamente los pasos de la nova cançó.

Estructura y problemas

Todo lo anteriormente expuesto ha dado como resultado el que durante muchos años el País Valenciano haya estado colonizado musicalmente por la pujante nova canço catalana. El mismo público acogía con mayor fervor a Lluis Llach, Ramón Muntaner o a Quico Pi de la Serra que a sus escasos e inmaduros cantantes. La reivindicación del idioma no ha prendido totalmente hasta hace bien poco, en un país que ya históricamente nació bilingüe. La dubitativa burguesía valenciana no apoyó en ningún momento los balbuceos de esta expresión, que un poco como penetración catalanista. La ausencia de grandes figuras literarias, a excepción de Vicente Ferrer, ponían a los cantantes ante el difícil problema de inventarse unas formas lingüísticas identificables con lo valenciano. Todo este cúmulo de circunstancias han definido lo que puede considerarse aspecto principal de la canción valenciana hasta hace un par de años: la duda, una terrible inseguridad que impedía avanzar más allá de los fracasos, de las decepciones.

Hoy en día

En el transcurso del tiempo algunas de estas dificultades se han ido superando. En los últimos años los recitales de artistas como Ovidi o Raimon han servido en algunas ocasiones para el lanzamiento de acompañantes ocasionales que realizaban las primeras partes. La consolidación de partidos políticos de carácter valencianista ha impulsado también a la canción, y poco a poco van apareciendo nombres que se agruparon en torno a oficinas de representación como Cantaire, o La Taba. Esta última ha conseguido además, que se editaron algunos LP que han aclarado mínimamente un panorama de por sí sombrío.Si bien no se haya directamente relacionado con este tema, se hace necesario recordar la Trobada dels pobles, que tuvo lugar el 18 de septiembre del pasado año en etestadio de la Unión Deportiva Levante. Este macro-festival agrupó cantantes de todos los puntos del Estado y abrió caminos a realizaciones más propiamente valencianas. Por otra parte, es indudable que la reforma en curso ha posibilitado, si bien con altibajos, un mayor contacto de los artistas con su público.

¿Quiénes son?

Dada su juventud, dentro de la canción valenciana todavía no han tenido ocasión de destacarse elementos indiscutibles. Las puertas permanecen abiertas y una gran cantidad de nombres se agolpan en ellas.Araceli BanyuIs, con un LP en su haber es uno, de los más firmes valores. Dentro de la inmadurez que es tónica general, Araceli avanza a pasos agigantados, aprendiendo a ,utilizar cada vez mejor su voz y perfeccionándose instrumentalmente. Alguna de sus canciones como Entre la multitud poseen una carga dramática y una efectividad fuera de lo común.

Al Tall (al tajo, al trabajo) basan su trabajo en la recuperación del folklore trad.icional del País Valenciano, terreno en el que han profundizado más que cualquiera de sus compañeros. Recogen músicas y ritmos al los que dotan, cuando es necesario, de una letra más adaptada a la actualidad.

Els Pavesos, son ya toda una institución. Su sátira encuentra lugar tanto en el rock como en la canción popular, desarrollándose su trabajo principalmente en fiestas de pueblos.

Lluis El Sifoner ha editado un LP en el cual se respira 1 sobre todo optimismo. Sana juerga basada en ritmos y formas, que como dice Vicent Pons, en el interior resultan de un «revival» inexpresable.

Podríamos decir, que de alguna forma éstos son los más conocidos, pero hay muchos más. Lluis Miquel, que tras abandonar la canción por un tiempo ha vuelto más fuertemente que antes, y Nelo Sorribes, Rafael Xambó, Josep Lluis Valldecabres, que editó hace poco un LP, y otros.

Todo un futuro

Como decíamos antes la canción valenciana no ha hecho más que nacer. La recuperación de grandes poetas como Vicent Andrés Estellés, demuestrajunto aldesarrollo de la gran tradición pictórica valenciana, como se puede ir configurando poco a poco una cultura que hasta ahora ha permanecido en estado latente y que los cantantes tienen la gran responsabilidad de impulsar hasta.sus últimas consecuencias. Cuando Raimon u Ovidi emigraron (por puras razones de supervivencia) esto no era posible. Hoy sí.