Regiones y tributos

Para el desarrollo industrial de las provincias Vascongadas y Cataluña han sido decisivos algunos factores que parecen olvidados. El primero de ellos es la protección arancelaria que frente a los productos importados ha tenido y sigue teniendo la industria nacional desde hace más de un siglo. El segundo ha sido la unidad nacional, que unida al primer factor ha puesto a disposición de la industria nacional y. concretamente, de las regiones industriales, de las que han sido pioneras las dos citadas, el mercado interior, sin el cual no se habrían podido desarrollar. En economía, como en otras cosas, el que da primero da dos veces, las primeras industrias atrajeron a las segundas y así se ha producido la congestión industrial de aquellas regiones y se ha inhibido la industrialización de las demás. Por otra parte, el ahorro generado en las regiones agrícolas ha ido a financiar las nuevas industrias que al amparo de la protección arancelaria ofrecía y ofrece mayores beneficios que la agricultura.

Nos encontramos con que ciertos extremistas piden la separación, pero ¿qué ocurrirá si esas regiones se separasen?

Al perder su principal mercado lo pasarían bastante mal, porque los demás comprarían a quien ofreciese mejor calidad y precio.

¿Con qué se compraría? Con las divisas de las exportaciones, con las remesas de los emigrantes, que en general no son vascos ni catalanes, con las divisas del turismo...

Algunos, en lugar de separatismo, piden solamente que se gaste en esas regiones los impuestos pagados por ellos. Con esto llegamos a lo del beneficio que las demás regiones reciben con la unidad.

Es lógico que quienes más beneficios obtienen tributen más y que estos tributos se distribuyan entre todos los que han contribuido a su obtención, pobres y ricos. Lo contrario sería como si el comerciante rico del pueblo, que se enriquece negociando con los demás vecinos, pidiese al Ayuntamiento que los impuestos que él paga se gasten ,sólo en arreglar su calle. La reacción de los demás vecinos tendría que ser irse a comprar a otra parte.