Chatear con César Vallejo o cómo usar la inteligencia artificial para acercarse al poeta peruano más universal

César Vallejo, ese poeta indescifrable que hacía suyas las palabras imprimiéndoles un tono sombrío y a la vez deslumbrante, es para las mayorías una pose en blanco y negro: el mentón apoyado en la mano derecha y la izquierda sosteniendo un bastón. Enternado, acaso serio, acaso triste, acaso simplemente pensativo. Un autor peruano que se volvió célebre después de su muerte en París, en 1938, y cuya poesía ha provocado numerosos estudios y no pocas filias alrededor del mundo.

En el marco de la Feria Internacional del Libro Lima 2023 (FIL), que se extenderá hasta el 6 de agosto, la Cámara Peruana del Libro ha presentado una experiencia única, acorde con estos tiempos, para despertar el interés del público: tener la posibilidad de chatear con Vallejo mediante la inteligencia artificial. “Es ingresar a un espacio nuevo de comunicación. Es conocerlo mejor, vincularnos con su impulso poética y acercarnos a su vasto mundo creativo. Vallejo es nuestro poeta universal, porque su obra que se ciñe a la condición humana explora los sentimientos más vinculados al hombre, como son el amor, el sufrimiento, la solidaridad, la fuerza emotiva”, dice Willy del Pozo, presidente de la Cámara Peruana del Libro.

La herramienta ha sido desarrollada por Content Media, marca de Making Connexion. Su directora de Innovación, Cristina Puma, da más alcances al respecto. “Usamos las bondades de la inteligencia artificial: Deep Fake, Chat GPT de Open AI y Zapier para que, desde cualquier parte del mundo, cualquier persona pueda interactuar con César Vallejo. La FIL Lima es una oportunidad para dar a conocer el Perú al mundo. Y nuestra estrategia de difusión no podía dejar de aprovechar este recurso”, afirma. Para chatear con el vate solo se debe visitar el siguiente link.

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'Heraldos Negros' de César Vallejo

La edición número 27 de la FIL, realizada en el Parque Próceres de la Independencia, en el distrito de Jesús María, es un homenaje al autor de Trilce, poemario que cumplió su primer centenario en el 2022. Santiago Roncagliolo, Premio Alfaguara, se suma a los festejos del poeta nacido en Santiago de Chuco, un pueblo en la serranía de la región de La Libertad. “Vallejo creó una voz propia llevando el lenguaje a donde nunca había llegado antes. Y también vivió más cosas en su corta vida que la mayoría de la gente. Vio de cerca la cárcel, la pobreza, la guerra civil, el comunismo. Hablar con él es hablar con las vanguardias más radicales y con la historia del siglo XX”, explica.

El crítico literario Ricardo González Vigil tiene una mirada más escéptica de esta herramienta tecnológica, impensada hace unas décadas, pero no deja de reconocer su valía. “Es una forma de interesar, no la mejor. Pero es una forma de acceder al público. Él es un poeta muy difícil, muy complicado y hay que estimular. El mejor modo de entrar es leer a Vallejo y a sus estudiosos”, señala. ¿Por qué hay que releer Trilce? “Es un poemario inagotable, en cada lectura uno le encuentra más sentidos, más niveles expresivos. Es un ejemplo de cómo la originalidad y el arte moderno, que rompe con el pasado, no se queda en un juego de formas, no se trata de hacer algo por ser distinto, estrafalario, sino porque es necesario que el arte vaya expresando la época que le toca y nuestra época es una época que encuentra, en el arte tipo Trilce, una expresión muy rica, que trasciende y abre la idea de una nueva humanidad. Trilce aspira a construir un nuevo horizonte. He ahí su vigencia, su actualidad”, describe González Vigil.

Finalmente, la lingüista y periodista Patricia del Río destaca este acercamiento a la poética vallejiana y alienta al público a vivir la experiencia una y otra vez. “Crear un chat en el que un Vallejo virtual absuelve nuestras dudas de la Feria, es una manera de acercar el personaje a muchos peruanos que lo sienten lejano, o que creen que es tema de gente muy culta. Es una manera de mostrarlo desde una perspectiva lúdica, bajarlo del pedestal donde lo ha puesto el tiempo y al que él nunca se hubiera subido. La tecnología no reemplaza, no suplanta, aproxima. Y hay que usarla una y mil veces si eso ayuda a fomentar la lectura o dar a conocer a grandes autores”, anima del Río. Vallejópatas, vamos, podría ser un punto de partida. A darse la oportunidad.