Declarado culpable el asesino del rapero Nipsey Hussle
El jurado estima que Eric Holder, de 32 años, fue el responsable de la muerte del artista, en marzo de 2019
Tres años más tarde, la muerte del rapero Nipsey Hussle ya tiene un culpable. Un juez ha declarado este miércoles culpable de cinco cargos a Eric Holder Jr., que el 31 de marzo de 2019 acabó con uno de los artistas más prometedores de Los Ángeles y quien había sido nominado al Grammy por primera vez. Holder, de 32 años, ha sido hallado culpable del homicidio en primer grado y de otros dos cargos de intento de asesinato al haber herido a dos testigos en el tiroteo ocurrido a las afueras de la tienda de ropa de Hussle, al sur de la ciudad. La resolución fue adoptada rápidamente, apenas seis horas después de que el jurado iniciara las deliberaciones, que se extendieron por dos días.
Nadie de la familia del rapero, cuyo nombre real era Ermias Asghedom, de 33 años, estuvo presente en los tribunales para oír el veredicto de un juicio que fue aplazado por la pandemia. Holder conocía a Hussle desde hace varios años porque ambos habían formado parte de las pandillas de los Crips. El acusado conocerá su condena el 15 de septiembre. Será entonces cuando sepa si pasará el resto de su vida en prisión. Su abogado, Aaron Jansen, centró la estrategia de la defensa en reducir el tiempo que su cliente recibirá en la cárcel. Su caso era complejo por el cúmulo de pruebas que apuntaban hacia Holder. Varios testigos, además de los vídeos recuperados por las cámaras de seguridad, hicieron más fácil al jurado llegar a la resolución. Jansen ha adelantado a la revista XXL, especializada en hip hop, que apelará a la condena una vez que se dé a conocer en septiembre.
La testigo estrella de la acusación fue Bryannita Nicholson, una amiga que acompañó a Holder el día del tiroteo. Ambos fueron a comer a un restaurante de hamburguesas sobre la avenida Slauson. Al llegar al lugar, Holder vio a Hussle a las afueras de su negocio, la tienda de ropa The Marathon Clothing. Hussle, hijo de un inmigrante de Eritrea, había invertido en propiedades y negocios en South LA, donde era un personaje muy querido y respetado. Nicholson dijo al tribunal que se acercó a él a pedirle una fotografía al rapero, quien había debutado en 2018 con su álbum Victory Lap.
Cuando los hombres se encontraron, Holder le preguntó a Hussle si este había estado diciendo por ahí que era un soplón. Holder y su amiga regresaron al coche, donde había una pistola guardada. Nicholson lo convenció de que guardara el arma y comenzaron a comer sentados dentro del auto. Minutos después, no obstante, Holder salió con brusquedad diciendo que regresaría inmediatamente. Bryannita escuchó los tiros mientras estaba en el vehículo. Segundos más tarde vio a Holder caminar rápidamente hacia ella y pedirle que se fueran de allí. El principal sospechoso fue detenido dos días después.
En las dos semanas que duró el juicio, la defensa de Holder intentó explicar a las nueve mujeres y tres hombres del jurado las reglas de la calle y las pandillas como los crips y los bloods, que protagonizaron una cruenta guerra en las calles de Los Ángeles durante los 80. El abogado Jansen argumentó que el ser llamado soplón por un personaje público como Hussle hizo que Holder perdiera el juicio. “Esto fue una provocación que agitó rabia y emociones muy poderosas”, dijo el letrado el jueves. Con esto, pretendía convencer en el tribunal de que su cliente no merecía ser declarado culpable de homicidio en primer grado, la más grave de las acusaciones porque indica que el victimario actuó con premeditación y ventaja.
La acusación respondió a este argumento explicando que pasaron nueve minutos en total desde que los hombres discutieron en el aparcamiento de la tienda hasta que Holder disparó contra el rapero. En ese tiempo, dijo el fiscal de distrito John McKinney, el acusado tuvo el suficiente tiempo para pensar el ataque, que tuvo 10 disparos. El fiscal también intentó desacreditar las afirmaciones de la defensa asegurando que, de acuerdo a los testigos, el reclamo que Holder hizo no fue de malas formas. Se cree que el motivo que lo orilló a cometer el homicidio son problemas o rivalidades añejas.
“Estas balas han traumatizado a toda una comunidad”, dijo McKinney al jurado, quien le ha dado la razón con su veredicto. “Crímenes como este no pueden ser contenidos... Las balas impactan en las personas o en los muros y son detenidas, pero en un sentido estas balas siguen viajando. Este barrio no ha olvidado”, añadió el letrado en sus argumentos finales en referencia al sur de Los Ángeles, una zona en la que todavía pueden apreciarse murales de Nipsey Hussle. Son muestras de un duelo que aún perdura.
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