‘Herida’: Halle Berry pierde el primer asalto
La actriz debuta en la dirección con un fallido drama en el que interpreta a una luchadora bregada a palos
En Herida solo funcionan las peleas, especialmente la coreografía final, en la que la veterana luchadora que interpreta Halle Berry le disputa el título a una campeona llamada Lady Killer. Es decir, en Herida solo funcionan las secuencias en las que instintivamente te tapas la cara para no sufrir tanto golpe. No es la única lucha impactante: la violenta secuencia de la pelea clandestina, sin reglas, sin límite y sin árbitro, también pone los pelos de punta. Berry interpreta a una alcohólica que después de una humillante paliza ha colgado los guantes y malvive con su manager, una bestia que solo quiere que ella vuelva al ring, aunque la destrocen.
El debut en la dirección de la actriz estadounidense solo se salva por ella como intérprete y por esos bailes a puñetazo limpio de los combates de Artes Marciales Mixtas (AMM). El resto de la película, en realidad toda, es un frankenstein construido a partir de clichés y recortes de personajes femeninos tan reconocibles como la Gena Rowlands de Gloria, la Hilary Swank de Million Dollar Baby o, en menor medida, la Marion Cotillard de De óxido y hueso. Con la película de Clint Eastwood las conexiones son evidentes. De hecho, el personaje de Berry podría ser, si hubiese sobrevivido, una Swank madura y en horas bajas o alguna de sus malencaradas rivales. Con el drama romántico de Jacques Audiard, Herida conecta por la vía del tremendismo, otra historia de superación en los bajos fondos. Y con Rowlands, lo de siempre: el instinto maternal nulo de una mujer dura que de forma tardía y algo culpable se ve obligada a cargar con un crío, en este caso su propio hijo. ¿Qué había ocurrido antes con el niño? ¿Quién era su padre? Da igual, las preguntas se apilan en una película cuyo desgarro acaba resultando inverosímil.
Herida no se deja casi nada en el tintero de las lobas solitarias: supervivencia al límite, maternidad problemática, hastío de la masculinidad tóxica y un tórrido idilio… con otra mujer. En un giro de guion que cuesta, como casi todo en esta película, tragarse, la entrenadora que interpreta la imponente actriz ugandesa Sheila Atim (Mabel en la serie de Barry Jenkins The Underground Railroad) cobra un inesperado protagonismo en un filme que maltrata a todos sus personajes secundarios. Unos diálogos de caricatura y una banda sonora infumable que sirven de colofón para una película a la que le falta eso que suele sobrarle a las buenas óperas primas: personalidad propia.
HERIDA
Dirección: Halle Berry.
Intérpretes: Halle Berry, Adan Canto, Sheila Atim, Stephen Henderson.
Género: drama. Estados Unidos, 2021.
Plataforma: Netflix.
Duración: 129 minutos.
Estreno: el 24 de noviembre.
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