_
_
_
_
EL HOMBRE QUE FUE JUEVES
Columna
Artículos estrictamente de opinión que responden al estilo propio del autor. Estos textos de opinión han de basarse en datos verificados y ser respetuosos con las personas aunque se critiquen sus actos. Todas las columnas de opinión de personas ajenas a la Redacción de EL PAÍS llevarán, tras la última línea, un pie de autor —por conocido que éste sea— donde se indique el cargo, título, militancia política (en su caso) u ocupación principal, o la que esté o estuvo relacionada con el tema abordado

Bennett y sus actrices

Lina Lambert lleva a los escenarios barcelonenses los monólogos de ‘Talking Heads’ del dramaturgo británico

Marcos Ordóñez
Lina Lambert (izquierda) durante una presentación en 2019 en el TNC de Barcelona.
Lina Lambert (izquierda) durante una presentación en 2019 en el TNC de Barcelona.May Zircus

Lina Lambert, una de nuestras mejores actrices, vivía en Londres, a finales de los ochenta, cuando descubrió al gran Alan Bennett. Un fuera de serie: escritor, dramaturgo, memorialista, y actor en la BBC y en el West End. “Le descubrí”, me dice Lambert, “precisamente con Talking Heads, que hemos tardado varios años en poder levantar aquí”. “Una de las singularidades de Bennett es que suele escribir para mujeres mayores. Los primeros Talking Heads para televisión son todos grandes nombres: Maggie Smith, Julie Walters, Penelope Wilton, Thora Hird, Patricia Routledge… Los episodios se hicieron en 1988,1998 y 2020”.

No fue fácil levantar el proyecto en Barcelona. A todo el mundo le gustaba mucho, pero lo consideraban “difícil”. Les parecía “muy británico”. “Para unos, ‘británico’ era muy serio. Para otros, era ‘humor negro’. Lo cierto es que no se puede encasillar en nada. Es ironía bastante agria, que habla de una forma de vivir, o mejor dicho, de no vivir. De gente que acaba por no hacer lo que siempre deseó hacer. Siempre he creído que Bennett habla, sobre todo, de los problemas del alma humana. Le propuse los textos a Moisés Maicas y le entusiasmaron, pero murió pocos años más tarde. Nos costó seguir adelante sin él, y en parte nos impulsó su memoria. La versión al catalán la hizo Anna Soler Horta, gran traductora y pareja de Maicas. Un trabajo endiablado: Bennett parece coloquial, pero no lo es. Es coloquial de los años ochenta y además de provincias, y con un toque un poco antiguo. Soler Horta tradujo tres textos. Los originales eran 13 o 15 episodios”. Los monólogos duran alrededor de 40 minutos. Lambert había escogido dos actrices y un actor, como en la versión inglesa. Xavier Albertí, director del Teatre Nacional, se decidió por tres actrices, que acabaron siendo Lambert, Imma Colomer y Lourdes Barba. Lambert hará Una cama entre las lentejas, que estrenó Maggie Smith; Colomer, La mano de Dios, a la que encarnó Eileen Atkins; y Barba, Las noches en los jardines de España, estrenado por Penelope Wilton. Las direcciones: Colomer dirige a Lambert; Lina a Barba, y Lourdes dirige a Inma. “En el Nacional ya lo presentamos así, con Montse Prat como productora artística de la compañía, si no hubiera sido por ella, no habría echado a volar”.

¿Y el título de Talking Heads, como el grupo americano? “Es una especie de frase hecha. Alude a gente que rompe a decir lo que no diría en su vida corriente”, sigue Lina Lambert. En el Teatro Akademia se estrenarán las tres piezas seguidas, a mediados de abril, y está por fijar la fecha del TNC. “Nos gustaría mucho girarla en catalán y castellano. Depende de Carme Portaceli, la nueva directora del Nacional, en su primera temporada”.

Toda la cultura que va contigo te espera aquí.
Suscríbete

Babelia

Las novedades literarias analizadas por los mejores críticos en nuestro boletín semanal
RECÍBELO

Regístrate gratis para seguir leyendo

Si tienes cuenta en EL PAÍS, puedes utilizarla para identificarte
_

Más información

Archivado En

Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
_
_