El rescate de una nave atrapada en un agujero negro gana el Minotauro de novela fantástica

Una novela de ciencia ficción de corte clásico, aunque empoderada (la protagoniza una mujer), es la ganadora del XV Premio Minotauro de género fantástico, dotado con 6.000 euros, que se ha fallado este mediodía en Barcelona y se publicará el 6 de octubre en la editorial, del Grupo Planeta. Frontera oscura, que se presentará oficialmente en el Festival Internacional de Cine de Sitges, es la historia del rescate en el año 2560 de una nave atrapada en el horizonte de sucesos de un agujero negro.

El autor es el sevillano de 35 años residente en Zaragoza Sabino Cabeza, licenciado en Psicología y suboficial del Ejército del Aire, que ha utilizado su experiencia militar para reflejar el ambiente de la tripulación del navío espacial Banshee, de la Flota Federal, con motores anagravónicos que permiten saltos espaciales. La Banshee, bajo el mando de la capitana Florence Schiaparelli, acude a ayudar a una nave sin identificar junto al agujero negro conocido como el Ojo de Dios (el título con el que el autor presentó la novela a concurso). La comandante deberá decidir si arriesga su astronave y su tripulación para tratar de salvar a la misteriosa nave en peligro. Cabeza es autor de varias novelas anteriores, pero Frontera oscura será la primera en publicarse.

La trama tiene un aroma a ‘Star Trek’ y es abundante en guiños y homenajes a los clásicos de la ciencia ficción

La trama tiene un aroma a Star Trek y es abundante en guiños y homenajes a los clásicos de la ciencia ficción, que el autor conoce bien (incluso le birló la colección del género de Acervo a su padre). Lo de Schiaparelli también suena a homenaje, en este caso al discutido descubridor de los canales marcianos. “Sí”, ríe Cabeza, “hay varias referencia similares, como un personaje que se llama Leavitt como la célebre astrofísica”.

El nombre del agujero negro, el Ojo de Dios, recuerda a la estrella de la famosa novela de Larry Niven y Jerry Pournelle, La paja en el Ojo de Dios. “Es coincidencia, no había leído esa novela y la estoy leyendo ahora. Mi referencia es a la nebulosa de la Hélice, en Acuario, a la que se la denomina también así. A mí me recuerda al ojo de Saurón de El Señor de los Anillos, que es la imagen visual que tengo de ese agujero negro que describo”.

Del hecho de que su protagonista sea una mujer subraya que no es ya ninguna novedad tener capitanas en la ciencia ficción y que en sus novelas salen muchas mujeres protagonistas. Los agujeros negros están de moda después de la noticia de que se detectó la onda gravitacional del choque de dos de ellos. “Es un tema interesantísimo, y me parece que películas como Interstelar han dado una imagen apropiada. Realmente es un tema muy complejo y yo no soy un especialista, pero he tratado de ser riguroso con la ciencia, en lo posible y deseable, dado que Frontera oscura es una novela de ficción, fantasía”.

"He intentado ser claro, primero entendiéndolo todo yo mismo, no es ‘Tenet’ ni mucho menos”, dice el premiado

¿Así, no estamos ante una obra de ciencia ficción dura como Misión de gravedad, de Hal Clement? “No, yo no calificaría a mi novela de hard, aunque hay algo de las paradojas de los agujeros negros que puede costar un poco; es más al estilo de Star Trek, que crea su propio lenguaje científico, no me importa tanto ser veraz. Pero intento no decir ningún disparate, al respecto me ha ayudado un amigo astrofísico. He intentado ser claro, primero entendiéndolo todo yo mismo, no es Tenet ni mucho menos”. La editorial califica la novela de space opera. “Tampoco lo es exactamente, no es tanto una pura aventura espacial. Estaría entremedias de la ciencia ficción dura, que a mí me gusta mucho mientras no te encorsete, y la space opera”.

Del hecho de ser un militar de aviación, Cabeza puntualiza que él es especialista técnico y forma parte del personal de tierra, dedicado a temas como la seguridad del vuelo y medio ambiente, y que ¡no le gusta volar! “Me da mal rollo, la verdad, lo paso mal, me parece poco natural. Soy de los que rezan para que se invente ya el teletransportador”. Dicho esto, el que la novela transcurra en una nave de la flota militar tipo Enterprise “me da la oportunidad de aprovechar mi conocimiento desde dentro de ese mundo de jerarquías, fidelidades y deberes”.

Del hecho de ser un militar de aviación, Cabeza puntualiza que él es especialista técnico y forma parte del personal de tierra, dedicado a temas como la seguridad del vuelo y medio ambiente

De los referentes de la ciencia ficción clásica en su obra, el escritor dice que son muchísimos, pero destaca a Ursula K. Le Guin -en Frontera oscura, explica, sale algo parecido al ansible, la herramienta de comunicación universal instantánea de la autora de Los desposeídos- y Ray Bradbury especialmente. También a Frederick Pohl “y Asimov, por supuesto”. Autor asimismo de novelas de fantasía, Cabeza señala la influencia que ha tenido de Tolkien. Insiste en que su novela es bastante startrekiana en el sentido de que no hay una historia de buenos contra malos y que el leit motiv es un rescate, una empresa humanitaria de cooperación con un mensaje en última instancia optimista sobre los seres humanos y su capacidad para trabajar juntos.

Al premio Minotauro han concurrido 449 manuscritos procedentes de diferentes países, principalmente España, México, Argentina, Chile y Colombia. También ha habido participación desde Brasil, Costa Rica, Cuba, Ecuador, Puerto Rico o EE UU. Cuatro obras pasaron a la final. La actual edición del premio coincide con el 20 aniversario de la adquisición de Minotauro por Grupo Planeta. El jurado ha estado formado por Sofía Rhei (escritora), Blanca Rodríguez (presidenta de la Asociación Española de Fantasía, Ciencia Ficción y Terror), Pablo Tébar (escritor y guionista, Premio Minotauro 2017), Roberto Jiménez (periodista del portal tecnológico Xataka) y la escritora y periodista Laura Fernández.