‘El autor’ y ‘La librería’ empatan a mejor película en los premios Forqué

En un galardón sin precedentes, los premios Forqué premiaron anoche ex aequo a El autor, de Manuel Martín Cuenca, y a La librería, de Isabel Coixet, como mejor película de ficción en 23ª edición. Hasta en esta ocasión, nunca había habido un empate en la categoría principal. Los premios Forqué, que homenajean en su nombre al director y productor José María Forqué, son otorgados por EGEDA, la entidad de gestión de derechos de autor de los productores audiovisuales, y se entregaron ayer en el Palacio de Congresos de Zaragoza. Era la segunda vez que se entregaban fuera de Madrid; en 2017 ya viajaron a Sevilla. El autor y La librería han derrotado en su apartado a Abracadabra, de Pablo Berger, a Verano 1993, de Carla Simón, y a Handia, de Jon Garaño y Aitor Arregi. Al escenario subieron los productores de ambas películas. No sus directores, ya que Martín Cuenca está rodando en Miami. Sí estaba presente Isabel Coixet que destacó la ayuda recibida de los productores españoles con los que trabajó en su drama, a diferencia de "los palos en las ruedas" que recibió en el extranjero.

El autor. Tráiler

Habitualmente, la ganadora en los Forqué suele repetir en los Goya, con lo que tras este resultado la carrera a los premios del cine español sigue incierta. En las anteriores ediciones, en esta categoría el galardón se lo llevaron Tarde para la ira, de Raúl Arévalo (2017), Truman, de Cesc Gay, (2016) y La isla mínima, de Alberto Rodríguez (2015). El premio a mejor actor recayó en Javier Gutiérrez, gracias a su trabajo en El autor, que ha derrotado a Juan Diego (No sé decir adiós), Andrés Gertrúdix (Morir) y David Verdaguer (Verano 1993). A mejor actriz el premio recayó en Nathalie Poza por su labor en No sé decir adiós, que ha competido contra Marian Álvarez (Morir), Adelfa Calvo (El autor), Maribel Verdú (Abracadabra), Bruna Cusí (Verano 1993) y Anna Castillo (La llamada). Por varios empates en el galardón a mejor intérprete femenina se dilucidó entre seis actrices, cuando lo habitual son cuatro.

En el apartado a mejor documental, el galardón recayó en Muchos hijos, un mono y un castillo, de Gustavo Salmerón, que inició su carrera triunfadora en verano al ganar el festival de Karlovy Vary. El director recogió el galardón acompañado de toda su familia, protagonista del filme, y por supuesto su madre, Julita Salmerón, el motor del filme. Si el director dijo: "Cuando no encuentras algo le preguntas a tu madre y ella te dice: '¿Has mirado en su sitio?'. Y ahí estaba la historia, en mi familia"; su madre apostilló: "Tengo 82 años, se me acerca el momento, pero estoy feliz porque termino la vida como actriz". En mejor cortometraje el premio se lo llevó ‘Madre’, de Rodrigo Sorogoyen, y en la categoría a mejor película latinoamericana el triunfo fue para la chilena Una mujer fantástica, de Sebastián Lelio. Finalmente, el trofeo al Cine en Educación y Valores se lo llevó Lo que de verdad importa, de Paco Arango, largometraje cuya recaudación ha ido íntegramente a diversas ONG.

La medalla de Oro de EGEDA, que se entrega a un cineasta por su labor como productor, la recibió en esta ocasión Carlos Saura, que suma un galardón más a un centenar de premios, entre ellos un premio BAFTA, el Oso de Oro y dos de Plata a mejor dirección en la Berlinale, el Gran Premio del Jurado en Cannes y en San Sebastián y dos premios Goya. En el escenario, el director oscense reconoció: “He hecho las películas que he querido hacer y eso es difícil”. La gala fue presentada por Boris Izaguirre y Elena Sánchez, en la que también actuó Edu Soto, que dio el contrapunto cómico. Y como es habitual, tuvo numerosas actuaciones musicales, con Sergio Dalma, Pastora Soler, el grupo Efecto Pasillo y nueve participantes de la presente edición de Operación Triunfo que se encuentran ya fuera de la Academia.