Así ha sido el chupinazo de los Sanfermines 2017

Con calor, nubes y polémica política de fondo por la presencia de una ikurrina en el balcón del Ayuntamiento, Pamplona ha dado comienzo, con el tradicional chupinazo desde la Casa Consistorial, a las fiestas de San Fermín 2017. Por delante, nueve días de fiesta ininterrumpida con cerca de 425 actos del programa oficial y un gasto previsto de 1,3 millones de euros, un 3% más que el pasado año. 

Todas las miradas estaban puestas en el balcón principal del Ayuntamiento de Pamplona para saber si entre las banderas oficiales iba a ondear la ikurriña, una vez que el Parlamento de Navarra derogó este año la Ley Foral de Símbolos. A pesar de la derogación, la Delegación del Gobierno había alertado hace unos días de que no sería legal colocar la enseña vasca, ni siquiera en el caso de que se invite oficialmente a una autoridad del País Vasco. Sin embargo, un informe jurídico del Consistorio sostiene lo contrario. Según ha señalado el Ayuntamiento, el informe concluye que "interpretando en conjunto la normativa estatal y foral, estas normas no obligan ni impiden al Consistorio a colocar la europea o la ikurriña"

Finalmente, operarios del Ayuntamiento han colocado la ikurriña en la fachada del Consistorio minutos antes del chupinazo. Esta mañana se había colocado un quinto mástil en la fachada del Ayuntamiento, junto a las banderas oficiales de Pamplona, Navarra, España y la Unión Europea, y 15 minutos antes de las doce se ha unido la ikurriña. La Delegación del Gobierno en Navarra ha interpuesto ya un recurso contencioso-administrativo contra la decisión. No es la primera vez que ocurre. En 2015, la ikurriña también ondeó en el Ayuntamiento durante el chupinazo. La decisión se justificó en que era un detalle de cortesía por la presencia, como invitadas, de tres parlamentarias vascas de EH Bildu.

La asociación DYA Navarra ha sido la encargada de lanzar el chupinazo anunciador tras conseguir el 74,2% de los votos en la consulta organizada por el Ayuntamiento. Paula Remírez y María Calado, voluntarias de DYA Navarra, han sido las que han prendido la mecha del cohete.

Meteorología preveía que se alcanzaran los 28 grados en Pamplona en el momento del chupinazo, de modo que las fiestas se han iniciado con calor. Para el resto del día se anuncian intervalos nubosos con baja probabilidad de chubascos y tormentas en las horas centrales y la temperatura máxima podrá llegar hasta los 32 grados. La mínima durante la madrugada será de 16 grados.

Al margen del chupinazo, acto principal de este día 6, a las ocho de la tarde se celebrará la Marcha a Vísperas de San Fermín, el primer acto religioso de las fiestas. Tendrá lugar en la Capilla de San Fermín de la Iglesia de San Lorenzo y participarán la capilla de Música de la Catedral y la Orquesta Sinfónica de Navarra.

Las fiestas cuentan con un dispositivo de seguridad en el que participarán 3.500 agentes de la Policía Municipal, Policía Foral, Policía Nacional y Guardia Civil. El dispositivo, que contará con helicópteros para el control aéreo, incluye personal especializado en atención a víctimas de violencia de género, patrullas para evitar la delincuencia callejera y vigilancia en festejos taurinos, en el caso de los encierros para impedir comportamientos que pueden conllevar un riesgo para terceros, y en el callejón y el coso para mantener el orden.

Los agentes, que también controlarán los principales accesos a Pamplona y las áreas festivas con mayor afluencia de público, en las que se han colocado bolardos y barreras de cemento, operarán estos Sanfermines en un nivel de alerta 4, el mismo en el que han tenido lugar otros acontecimientos como las Fallas o la Feria de Abril.

Tras la violación múltiple del año pasado, el Ayuntamiento de Pamplona pondrá el foco en la prevención de las agresiones sexistas durante las fiestas. Así, ha elaborado la estrategia Pamplona libre de agresiones sexistas que incluye la campaña de prevención, información y sensibilización para estas fiestas, que ha ampliado sus acciones para que la mano roja, símbolo que identifica la campaña, tenga una presencia constante en las calles de la ciudad.

El dispositivo sanitario del encierro es otra parte fundamental de los Sanfermines, que este año contarán con 10 puestos médicos (atendidos por 70 profesionales) repartidos en los 850 metros del recorrido, además de cinco sanitarios de apoyo y 16 ambulancias. El año pasado, en los encierros de Pamplona corrieron 16.448 personas, 181 menos que en 2015 (un 1,09 % menos), según datos del Ayuntamiento.

El programa oficial de las fiestas cuenta con más de 425 actos, de los que el 61% (261) son musicales. Conciertos, verbenas, actividades infantiles como marionetas, el teatro de calle familiar, festivales de distintas modalidades de deporte o danza, paseos de la Comparsa, fuegos artificiales, encierros, corridas de toros y la procesión de San Fermín conforman el programa de unas fiestas que culminará el día 14 a medianoche con el Pobre de Mí.

Los encierros son uno de los principales atractivos de las fiestas y el motivo por el cual son conocidos en el mundo enero. Las ganaderías que participarán este año son Cebada Gago, que protagonizará la primera carrera del día 7; José Escolar Gil, el día 8; Puerto de San Lorenzo, el día 9; Fuente Ymbro, el día 10; Jandilla, el día 11; Victoriano del Río, el día 12; Núñez del Cuvillo; el día 13; y Miura, que pondrá fin a los encierros el día 14.

El recorrido del encierro se cerrará cada mañana a las 7.15. De esta manera, se busca facilitar la seguridad del evento, el control de accesos de quienes quieran participar en los encierros y la salida de aquellas personas que no reúnen las condiciones para la carrera.