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Sebastián Castella corta dos orejas y sale a hombros de la plaza México

La actuación policial impidió que se produjeran desórdenes en la segunda corrida en Bogotá

El diestro Sebastián Castella fue el triunfador de la corrida celebrada el domingo en la monumental mexicana tras cortar dos orejas y salir a hombros. Un trofeo paseó el peruano Andrés Roca Rey, y los mexicanos Octavio García El Payo y el rejoneador Jorge Hernández Gárate se fueron en vacío.

Se lidiaron ocho toros del hierro de Los Encinos, uno de regalo, y la corrida fue presenciada por 16.000 espectadores.

Hernández Garate tuvo una actuación aceptable con momentos lucidos sin terminar de romper. Acertó con el rejón de muerte y fue aplaudido.

Castella se llevó el lote bueno; al primero de la lidia ordinaria hizo una faena sin plan, con pausas largas y momentos buenos, mató de bajonazo y saludó en el tercio. Mucho mejor en el gran cuarto, con una faena bien estructurada que fue creciendo y la culminó con una gran estocada; cortó dos orejas y fue paseado a hombros.

El Payo tuvo momentos de calidad con su primero, sobre todo en su toreo por naturales, pero pinchó antes de una media y todo quedó en palmas. Con el quinto, sin opciones, un tanto áspero, se mostró decidido, sin calar en el ánimo de la gente. Silencio.

Roca Rey se llevo un lote muy malo. El tercero era un toro sin trasmisión. Estuvo en torero y mató de una estocada fulminante. Le concedieron una oreja protestada que tiró el torero y dio vuelta al ruedo. Ante el sexto, sin calidad y sin emplearse, cumplió y fue silenciado. Regaló el séptimo que tampoco caminó y el peruano hizo el esfuerzo sin lograr el propósito. Mal con la espada y silencio.

Oreja para Hermoso en Bogotá

El rejoneador Pablo Hermoso de Mendoza cortó la única oreja de la segunda corrida del abono bogotano, en la que los méritos de los alternantes no encontraron respuesta en la suerte suprema.

El también español Miguel Ángel Perera dejó sensación de poder y mando en sus dos faenas, pero fracasó con la espada. Igual sucedió con el colombiano Manuel Libardo.

En general, los toros de Las Ventas del Espíritu Santo se prestaron para el lucimiento de los alternantes. La afición respondió y hubo más de tres cuartos de entrada, con el fondo de un dispositivo policial que evitó agresiones de parte de animalistas radicales, como sucedió el pasado 22 de enero.

Con tres cuartos de entrada, se lidiaron seis toros de la ganadería de Las Ventas del Espíritu Santo, bien presentados y nobles, en general.

Manuel Libardo: pinchazo hondo y dos intentos de descabello, palmas. Dos pinchazos y entera. División de opiniones tras aviso.

Miguel Ángel Perera: dos pinchazos y contraria, ovación. Dos pinchazos y entera, palmas.

Pablo Hermoso de Mendoza: dos pinchazos y rejón caído, palmas. Pinchazo y rejón entero, oreja.

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