Diez perlas para la Concha
Un repaso a lo más interesante del certamen de cine, que comienza hoy su 64ª edición
Si el año pasado no hubo glamur, la 64ª edición del festival de cine de San Sebastián, que se celebra desde mañana viernes al sábado 24, rebosa de nombres conocidos, películas arrebatadas a otros cértamenes y grandes dosis de realidad social. De entre sus ciclos (que llegan a la quincena entre secciones, homenajes, ciclos temáticos y concursos), hemos destacado diez momentos especiales:
* Sigourney Weaver: el miércoles 21 la neoyorquina recogerá el segundo de los premios Donostia de este año (el primero es para Ethan Hawke). Tres veces candidata al Oscar -por Alien, Gorilas en la niebla y Armas de mujer- su valor sin embargo está más allá de los premios de Hollywood. Anclada en el imaginario colectivo gracias a su inmenso talento (y tamaño, mide más de 1,80 metros), Susan Alexandra Weaver siempre será la chica de Cazafantasmas, la teniente Ripley de Alien, y la coprotagonista de El año que vivimos peligrosamente, La calle de la Media Luna y La tormenta de hielo. Con España su relación empezó al encarnar a la reina Isabel en 1492, la conquista del paraíso, y ha rodado con dos directores españoles: Rodrigo Cortés, en Luces rojas, y J. A. Bayona, cuya Un monstruo viene a verme servirá como presentación de este Donostia. Atentos a la película de Bayona, el spielberg que le hubiera gustado rodar a Spielberg.
* El fin de la violencia etarra: las conversaciones y encuentros celebrados a la largo de 10 años para intentar acabar con la violencia de ETA son analizados en el documental El fin de ETA que, con guion de los periodistas Jose María Izquierdo y Luis Rodríguez Aizpeolea, dirige Justin Webster. La película da la voz a los tres protagonistas principales de este acontecimiento, Alfredo Pérez Rubalcaba, Jesús Eguiguren y Arnaldo Otegi, junto a una veintena más de personas, víctimas, políticos y ex presos etarras. Se presenta el lunes en la sección Zinemira.
* Snowden: las desventuras del analista de la CIA que dejó al aire los grandes secretos del espionaje estadounidense, vistas por el más pertinaz crítico estadounidense del american way of life. Oliver Stone vuelve por sus fueros con la película que el director de Cannes confesó que hubiera querido tener en su certamen. El jueves 22 es su día grande en el Zinemaldia.
* Bigas Luna en la intimidad: escenas únicas de la vida del artista Bigas Luna, fallecido en 2013, conforman la película Bigas X Bigas, una especie de vídeo-diario que pretende abrir las ventanas a los momentos más íntimos de este realizador y de muchos de sus amigos, como Leonor Watling y Aitana Sánchez Gijón. Es un viaje en el que se muestra al Bigas más íntimo y personal, mucho más allá de su aspecto artístico. La película, una proyección especial dentro de la sección oficial, cuenta como productor a Javier Bardem, que estará presente en San Sebastián.
* Nocturama: el francés Bertrand Bonello, director de mirada incisiva, se lanza a contar una historia de atentados en el París actual. Los ecos con la realidad son demasiado obvios como para que en Cannes no se atrevieran a proyectarla. El domingo 18 sí se podrá ver en Donostia.
* El espía que engañó a todo un país: Alberto Rodríguez vuelve a la sección oficial este sábado con El hombre de las mil caras, una historia de tramposos y corruptos basada en la vida de Francisco Paesa, uno de los personajes más intrigantes de las últimas décadas en España, y en su relación con Luis Roldán. Es uno de los platos fuertes de la oferta del cine español en la ciudad donostiarra.
* Animación: en San Sebastián hay espacio para muchos dibujos animados, desde por ejemplo la sección Oficial, donde fuera de concurso participa la japonesa Kimi no na wa, otro trabajo del estudio Toho, en esta ocasión dirigido por Makoto Shinkai. Pero las dos grandes joyas se esconden en otras secciones. Por un lado, Ma vie de Courgette, protagonizada por Calabacín, un huérfano de 9 años que aprende a integrarse en un hospicio, y que es la opción de Suiza para los Oscar. Por otro, La tortuga roja, nacida del estudio Ghibli con director holandés, Michael Dudok de Wit, un holandés que aquí ha creado una joya muda centrada en la vida de un naúfrago en una isla desierta... no tan desierta.
* Isabelle Huppert: la actriz francesa, considerada por muchos la intérprete más importante del momento, se atreve con todo. En Zinemaldia, defenderá dos grandes títulos en la sección Perlas: Elle, de Paul Verhoeven, donde Huppert se somete a un juego sexual muy potente, y la francesa El porvenir, dirigida por Mia Hansen-Løve, en las que la intérprete crea un canto a la libertad personal y a la posibilidad de reinventarse la vida. Dos caras de un gran talento, que acaba de rodar de nuevo con Haneke.
* Marcianos: como si no hubiera pocos problemas en la Tierra, ahora llegan desde fuera... y por partida triple. En Colossal, de Nacho Vigalondo, una estadounidense (Anne Hathaway) descubre su extraña conexión con un monstruo que asuela Asia; en La llegada, de Denis Villeneuve, una lingüista (Amy Adams) es reclutada por los miitares para comunicarse con los extraterrestres, y en Midnight Special, de Jeff Nichols, un padre (Michael Shannon) protege a su hijo, poseedor de extraños poderes.
* Doce visiones de una ciudad: en colaboración con San Sebastián 2016 Capital Cultural Europea, se presenta en el certamen Kalebegiak, en la que doce realizadores vascos ofrecen sus retratos de la ciudad. Nombres consolidados, como Imanol Uribe, Julio Medem, Daniel Calparsoro o Gracia Querejeta, conviven en este proyecto con cineastas menos conocidos como Telmo Esnal, Ekain Irigoien o María Elorza. Kalebegiak se proyectará en el Velódromo el día 21.
"Es un insulto a la mujer seleccionar películas solo porque sean de una directora"
Dice José Luis Rebordinos, director del festival de San Sebastián, que él no cree en cuotas: "Nosotros no seleccionamos en función del género y pienso que eso es lo peor que podemos hacer por las cineastas, es un insulto al género femenino. Yo me reuniré con quien quiera para estudiar qué podemos hacer desde el festival en favor del cine hecho por mujeres". Se refiere así al hecho de que de toda la sección Oficial, 24 largometrajes, solo uno, el de inauguración, está dirigido por una mujer. "Lo mismo es por lo que me niego a censurar un filme por su país de procedencia. Insisto: en el certamen hay un 26% de filmes hechos por mujeres, 47 películas en total. Y se nos olvida que faltan también productoras, directoras de fotografías... No quiero quitarme responsabilidades, e intentamos que haya jurados paritarios, hacer más cosas, pero de ahí a seleccionar".
La 64ª edición es la sexta que dirige Rebordinos: "Este es un puzzle en el que las piezas deben de encajar. El año pasado nos faltó glamur, lo que sí tenemos ahora. Pero sobre todo un festival debe de servir para descubrir cosas. En esta ocasión hay seis óperas primas en el concurso oficial, de 17 en total. Desde que estoy yo, es el mayor número de debutantes, y estoy contento". Otra faceta que le encanta describir es el rejuvenecimiento de los empleados del festival: "Y no hay más que mirar el organigrama. Hoy si yo faltara no pasaria nada porque el equipo anda solo. Hicimos un plan a cuatro años para potenciar la industria y ha funcionado muy bien. Es más hemos ralentizado nuestro crecimiento porque faltan hoteles... algo que el año que viene será muy distinto. Cuando acabe el festival y se celebren las elecciones auonómicas y generales, al nuevo Consejo de Dirección le plantearemos un nuevo plan de cuatro años con nuevas líneas generales". No quiere adelantarlas. "Primero tiene que saberlo el Consejo".
Y sobre este año, apunta: "Es un año en el Zinemaldia muy social, con cine que habla de política, de la realidad actual, y de jóvenes que no encuentran su sitio. En verdad, es que con la crisis actual el cine mira mucho a la realidad. Incluso el de género transgrede sus barreras para mostrarlo. Por ejemplo, el cine negro es perfecto para hablar de sociedades desestructuradas".
Babelia
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