J. W. Anderson teje un punto de inflexión para Loewe
El diseñador británico presenta en París su primer trabajo para la firma de origen español Se trata de una colección masculina “pragmática y natural”
“Con esta colección pretendo que Loewe le hable a una audiencia más grande. Quiero que desde Japón, Estados Unidos o Rusia reconozcan la maestría de sus artesanos, su creatividad y su patrimonio cultural”. Jonathan William Anderson enuncia su ambicioso plan mientras muestra su primer trabajo al frente de la firma de origen español: la colección masculina para la próxima temporada primavera-verano. El diseñador británico de 30 años fue nombrado director creativo de la marca el pasado septiembre, tres meses después de que su compatriota Stuart Vevers, que ostentaba el cargo desde 2007, anunciase por sorpresa que abandonaba la casa fundada en Madrid en 1846 para fichar por la estadounidense Coach.
Anderson promete que el suyo es un compromiso a largo plazo. “No pienso moverme de aquí hasta que consiga mi objetivo: construir una marca global que compita de tú a tú con el resto de maisons del grupo Louis Vuitton Möet Hennessy [LVMH]”, propietario de Loewe desde 1996. Para enfrentarse a gigantes como Céline, Marc Jacobs o Givenchy, el creador ha apostado por ese difícil ejercicio de funambulismo que supone intentar modernizar una firma centenaria reinterpretando sus clásicos. Una acrobacia que puede terminar tan lejos de los clientes tradicionales como de los consumidores más vanguardistas, pero que Anderson ejecuta con valentía y coherencia. Hace poco más de un mes, el creador desvelaba el rediseño del clásico logo de la casa, con las eles más separadas y redondas. Presente ya en embalajes y productos, sintetiza, como solo un símbolo puede hacerlo, la nueva filosofía de la marca: respetuosa con la herencia pero actual.
Además de emblema y diseñador, Loewe acaba de estrenar oficinas en el barrio parisino de Sant Sulpice. Allí se pudo ver el viernes una versión del bolso Amazona, auténtico emblema de la casa, más cercano al modelo original lanzado en 1975 que a las últimas declinaciones: Toda una declaración de intenciones y casi una metáfora del punto de inflexión que supone la incorporación de Anderson en la historia de la marca.
“Para mí, España es Ibiza, Madrid, Barcelona. Lugares donde la gente viste de forma relajada y elegante. Y eso es lo que quiero transmitir: un estilo en las antípodas de la rigidez y el encorsetamiento”, explica el diseñador. Quizá por eso las espadrillas y los volúmenes amplios protagonizan el armario masculino de Loewe. Anderson apuesta por prendas “pragmáticas y naturales”, en las que las fronteras entre géneros se difuminan: pantalones vaqueros con enormes vueltas en los bajos e impolutas chaquetas de cuero perfecto junto a gabardinas de ante que responden a ese patronaje donde los setenta y el estilo futurista se encuentran. Mención aparte merecen las largas camisas desestructuradas que podrían acompañar tanto al hombre como a la mujer, de la mañana a la noche.
Esta propuesta silencia las voces que califican de sorprendente su nombramiento. Formado en el London College of Fashion y en Prada, ha conseguido hacerse un nombre en la industria de la moda gracias al trabajo conceptual y al personal uso de los materiales que exhibe en su propia firma, J. W. Anderson, fundada en 2008 y de la que LVMH es accionista minoritario. Este proyecto –asegura- satisface todo su apetito experimental y es por ello que puede volcarse, sin frustraciones, en la elaboración de un guardarropa que pretende permanecer en activo temporada tras temporada.
Prendas sin fecha de caducidad pero un tanto impacientes. Una pequeña selección de la colección presentada en París estará disponible en la web y en algunas boutiques de la marca desde el sábado. A mediados de julio llegará a Estados Unidos, un mercado que la casa busca reforzar con la apertura en noviembre de una tienda en Miami. Hace casi un año que los puntos de venta de Loewe no reciben piezas firmadas por un diseñador, el mismo tiempo que ha pasado entre el último trabajo de Vevers y el primero de Anderson.
El modista ha aprovechado también la presentación parisina para mostrar la nueva campaña publicitaria de la marca. Realizada por el fotógrafo Stven Meisel incluye imágenes tomadas por él para Vogue Italia en 1997 y que, en palabras de Anderson, ayudan a componer su visión del universo Loewe.
Babelia
Tu suscripción se está usando en otro dispositivo
¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?
Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.
FlechaTu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.
En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.