Y el 1 de enero, nuevos incentivos

Han sido años de negociaciones, de tensiones entre productores y el Ministerio de Hacienda, con los representantes de la Secretaría de Estado de Cultura —en concreto, del ICAA, el organismo que regula el cine— como meros convidados de piedra. El 18% de incentivos fiscales para los rodajes en España ha sido calificado en diversas ocasiones por directivos de FAPAE, la confederación de asociaciones de productores españoles, como de raquítico. El lunes, cuando el Gobierno detalle todo el anteproyecto de ley de la reforma fiscal, ahí estará el nuevo porcentaje de incentivos fiscales que se aplicará a los rodajes de cine en España. Y, según fuentes consultadas por este diario, será del 30%. También es cierto que, como dice un productor, una cifra inferior sería “ridícula”. “No valdría para ser competitivos”, asegura, “porque otros países europeos ofrecerían por tanto mejores incentivos y no podríamos aprovechar nuestras ventajas, como los radicales cambios de paisaje en muy poca distancia o el buen tiempo, imprescindible para los rodajes”. Lo que sí es seguro es que Canarias pasará del 38% al 45%, y con ello seguirá siendo el territorio europeo más apetecible fiscalmente para filmar.

Los productores audiovisuales han pasado bastantes nervios estos días. Saben que el anteproyecto debe empezar ahora su tramitación para que pueda convertirse en Ley y entrar en vigor el 1 de enero de 2015. Cualquier retraso en este proceso impediría su aplicación ese día y obligaría a esperar a 2016. Además, con el descenso del dinero que el Gobierno de Mariano Rajoy ha destinado cada año al Fondo de Protección de la Cinematografía, de donde principalmente salen las ayudas a las películas, el incentivo fiscal es la única tabla de salvación del sector. Y finalmente, cerrado este apartado, por fin se podrá preparar la nueva Ley del Cine. Aunque al ritmo que se está elaborando puede que hasta acabe antes la legislatura.