Patricio Pron recuerda la música de Spike Jones
Un tiempo atrás, mientras escribía los relatos de La vida interior de las plantas de interior, recordé por alguna razón al músico estadounidense Spike Jones, que solía conducir su orquesta a punta de pistola, y también me acordé de All I want for Christmas is my two front teeth, esta canción en la que un señor de bigote finge ser un niño al que le faltan dos dientes. Veo nuevamente el vídeo de una de sus interpretaciones y no sé qué es más perturbador: si las rodillas desnudas del cantante, su pésimo afeitado, que le da un aire de gánster infantil, o la bocina que suena una y otra vez de fondo como si un autobús estuviera a punto de arrollarlo.
Al cumplir siete años, Frank Zappa recibió como regalo su primer disco; un Dios irónico quiso que fuera precisamente esta grabación de All I want for Christmas is my two front teeth. A Zappa, quien aún carecía de su icónico bigote y no fumaba (el bigote crecería tiempo después, pero el músico comenzaría a fumar al año siguiente, con ocho), el disco le gustó tanto que escribió a RCA Victor pidiendo una fotografía autografiada. A vuelta de correo recibió la de George Rock, el cantante de la pieza. “Fue una cosa aterradora de recibir por correo”, contó Zappa más tarde, aunque una fotografía del propio Spike Jones hubiera provocado el mismo efecto.
Al escribir los relatos de este libro escuchaba a ambos músicos y pienso que algo de lo que ellos hicieron (su cuestionamiento de las convenciones, su humor, su libertad formal) está también en algunos de ellos. No es una mala banda sonora para un libro, pienso.
