Las claves de la 'Potterdependencia'

Joanne Katherine Rowling era una madre soltera que vivía en la década de los 90's de las ayudas de la seguridad social en Edimburgo. Pero un buen día, cuando viajaba en el tren se le ocurrió la historia de un joven huérfano, maltratado por sus familiares, que un día descubre que es un mago famoso que derrotó a un poderoso mago cuando era sólo un bebé. Después de ser rechazado por varios editores, la casa Bloomsbury decidió publicar en 1997 una primera edición de mil ejemplares, la mayoría destinados a las bibliotecas.

Catorce años después, unos 400 millones en beneficios por la venta de libros, un parque temático y millones de seguidores en todo el mundo, la saga de Harry Potter dice adiós. ¿O no? La franquicia, una de las más lucrativas de la historia, ha batido el record de ventas de taquilla con la última parte de la saga en su primer fin de semana con unos ingresos de 480 millones de dólares (unos 339 millones de euros). Muchos ya la incluyen en el club de las grandes sagas como Star Trek y Star Wars que generan pasiones entre sus fan y que pueden mantener la llama viva por varias generaciones. Pero ¿qué mueve a estos seguidores a mantener viva la pottermanía?

Según Guillermo Fouce, doctor en psicología social, el fenómeno fan es algo que existe desde siempre, es bastante frecuente en cada generación. Sin embargo desde hace unos años ha adquirido más dimensión e intercomunicación con las nuevas tecnologías, que facilita la organización de grupos, la celebración de concursos y convenciones, y la interacción de los seguidores.

El escritor Stephen King, quien es un fan declarado de la saga, había escrito en el 2007 que el éxito de J. K. Rowling se basaba en que sus libros evolucionaban mientras avanzaba la historia. "Los personajes de Jo Rowling se hicieron mayores, y su público se hizo mayor con ellos".

Este es el caso de Almudena Martínez-Cardeñoso, quien conoció la historia de Harry en el 2001 cuando tenía 16 años. Su madre le compró el cuarto libro a un hijo de sus amigos, pero resultó que el niño ya lo tenía así que se lo quedaron en su casa. Le llamó la atención y decidió tomar prestado el primero de la biblioteca y "hasta el día de hoy". Su libro preferido es el séptimo "básicamente porque rompe completamente con todo, puede ocurrir cualquier cosa, tienes los nervios de punta durante todo el libro, pero es también es el más maduro, emotivo y emocionante.

Fouce explica que este tipo de interés por una película, un grupo musical o una historia suele surgir en la edad adolescente y mientras en algunas generaciones decae, en otras el público que crece con sus personajes los mantiene en la madurez.

Leandro Ramírez, de 30 años, estaba en la universidad cuando conoció a Harry Potter. "Llevé a mis sobrinas al cine y elegimos la única película infantil en cartelera: Harry Potter y la Piedra Filosofal. Me pareció entretenida". Lo suficiente como para que al pasar por un centro comercial unos días después y ver los libros en oferta se decidiera a comprarlos. Desde ese día es fan.

"Suelen enganchar en la época adolescente y luego permanecer en la madurez, incluso crecer con la evolución de los personajes", nos explica Fouce, quien expone que este fenómeno está ligado a lo juvenil. Sin embargo, los seguidores pueden ser de cualquier edad. Muchos de los que siguen la saga actualmente son los hijos, sobrinos, y otros parientes menores de los primeros fans.

Virginia Roa, tiene 15 años y conoció la historia cuando tenía cinco por su hermano mayor Joseph, quien descubrió los libros justo cuando comenzaron a ser publicados. Como era muy pequeña para leerlos y entenderlos, comenzó viendo las películas. "Se convirtió en una tradición familiar. Además mis amigos y yo compartimos la misma pasión por el personaje. Se ha convertido en una forma de hacer amigos entre personas que nunca se hubieran conocido, de otra forma." Su libro favorito es Reliquias de la Muerte porque le aclaró muchas dudas. "Aunque estaba triste porque se terminaba la historia tengo que admitir que J. K. Rowling sabe como finalizar una trama con estilo".

Una de las claves del éxito de los libros es que los seguidores se identifican con los personajes. Carolina Martin afirma que su personaje favorito hasta el libro siete era Neville Longbottom: "es un poco torpe, como yo. Ahora soy fan de Snape por la profundidad de su carácter. Duré seis libros odiándolo y ahora me encanta".

Para Jessica Rodríguez su personaje favorito es Hermione Granger porque tiene muchos defectos. "Creo que es más humana y sin importar lo que Harry le haga se mantiene a su lado, lo que considero importante porque muestra que hay gente que pone sus propios problemas a un lado para ayudar a alguien que tiene dificultades mas serias.

Fouce, quien es también profesor en la Universidad Carlos III, explica que hay suficientes ejemplos en la historia contemporánea sobre este fenómeno y especialmente en el área musical como lo vivido con The Beatles o los Rollings Stone. "Tiene que ver con la búsqueda de la identidad, con el quien soy".

Pero no a todos nos gustan los buenos, hay quien prefiere a los malos porque se sienten más identificados con ese personaje o por la fascinación que les genera. Almudena nos explica que Snape es su favorito: "Es uno de los personajes más complejos que he visto nunca. J. K. nos manipuló brutalmente para que lo odiásemos y lo perdonásemos. No sé, cuando de repente todo encaja comprendes todo en él, y no puedes menos que adorarlo."

Sin embargo la misma J. K. Rowling declaró en varias entrevistas luego de la presentación del libro séptimo, que Severus Snape no era buena persona: "Snape es un hombre complicado, amargado, rencoroso, un abusón, incluso hasta el final del libro. Pero también es un hombre bravo, capaz de amar. Con muchos defectos, como todos". Fouce explica que normal que se admire a alguien cuyos valores y actitudes no sean positivas. Admirar a personajes como Darth Vader, Snape o Marilyn Manson es parte de la propia configuración de la personalidad. "Hay quien se siente atraído por personajes con un liderazgo negativo o no tan positivo. La gente se identifica con Darth Vader por la fascinación que genera el personaje."

Quizás por eso incluso Lord Voldemort, el mago tenebroso al que se enfrenta el protagonista, tiene miles de club de fans en la web. Será por lo que nos cuenta Carolina que "a veces, los malos también molan".