El Teatro María Guerrero estrena 'Sangre Lunar', inspirada en la misma historia que 'Hable con ella'
El espectáculo lleva a escena por primera vez el complejo texto de José Sanchís Sinisterra
El Teatro María Guerrero acoge el jueves el estreno de Sangre Lunar, un espectáculo que lleva a escena por primera vez, y con un planteamiento operístico, el complejo texto de José Sanchís Sinisterra, inspirado en la noticia de prensa que originó también Hable con ella, de Pedro Almodóvar.
Se trata de una nueva propuesta del Centro Dramático Nacional, que tiene a Sanchís Sinisterra entre sus autores "asociados" y que ha encargado la dirección a Xavier Albertí, un interesante "binomio" a juicio del director del centro, Gerardo Vera, quien ha subrayado que "no se atrevió" a poner en escena él mismo Sangre Lunar.
Esta obra, cuyo montaje parece una "especie de ópera de cámara contemporánea" y que estará en cartel hasta el 23 de abril, arranca con el escándalo que se produce en una residencia clínica cuando se descubre que Lucía, una joven paciente que lleva 10 años en coma profundo, ha sido violada y ha quedado embarazada.
Una carga de emociones
Gerardo Vera ha mostrado su "fascinación" por la carga de emociones que suscita Sangre lunar, sin "nada que ver" con el filme de Almodóvar. "Sanchís nos plantea una fábula, un cuento de hadas que necesita una solución musical por el desarrollo complejo del texto", ha explicado el director de escena, que se ha servido para construir el espectáculo del compositor catalán Albert Llanas, discípulo de Carles Guinovart, Josep Soler y Franco Donatoni, y premio de Composición Reina Sofía (1996).
Llanas, que por primera vez trabaja en Madrid en un montaje teatral, ha aclarado que el espectáculo parte de unos "planteamientos muy próximos a los ítems de la composición musical, el formalismo y la sensibilidad, y utiliza como referente una canción de cuna de Strauss que aparece en el texto". En el escenario interviene una acordeonista (Rosalía Cabanilles), quien resalta con este instrumento los sonidos de los respiradores de las salas de urgencia e interpreta una "fuga" compuesta por Llamas para complementar el "tratamiento musical que hace el autor de las palabras".
Sin temor a confesar que en un primer momento dirigir un texto de Sanchís Sinisterra "da cierto pánico", Albertí, también músico y compositor, se enfrenta a Sangre Lunar después de haber trabajado como director de escena con algunos de los discípulos del dramaturgo, al que definió como una "personalidad sugerente y única". En esta obra, el autor "amplifica las zonas residuales y oscuras" del cerebro de los personajes y da voz en un monólogo final a la mujer en coma, pero "no para decir que va a volver a la vida, el violador no es el príncipe de la historia, sino para hablar de las inteligencias no convencionales, de lo que hay en sitios donde no sabemos lo que hay, en tantas demencias o en el alzheimer".
Esta idea de sumergirse en la mente humana de cada personaje y la compleja estructura de la obra ha supuesto un reto para los actores del elenco, integrado por Lurdes Barba, Borja Elgea, Lina Lambert, Isabel Rodes, Patxi Freytez, Antonio Valero y Mario Vedoya, quien ha agradecido la "fortuna" de estar a las órdenes de Albertí, una garantía ante un texto con el que "es muy fácil naufragar". En el montaje, Lucía Quintana pone la voz en off del monólogo final de la mujer en coma, que en escena está presente gracias al trabajo de una profesora de técnicas de movimiento, que permanece inmóvil durante toda la función, pero hace sentir que el personaje "está en algún sitio".
Tu suscripción se está usando en otro dispositivo
¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?
Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.
FlechaTu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.
En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.