La sexta entrega de Harry Potter bate todos los récords de ventas en Reino Unido
Horas de cola en China para comprar el último libro de la británica J. K. Rowling
Harry Potter and the Half-Blood Prince, la sexta y penúltima entrega de la serie creada por la escritora británica J. K Rowling, va camino de convertirse en el libro más rápidamente vendido de la historia. Con más de dos millones de ejemplares vendidos en Reino Unido las primeras 24 horas desde su salida al mercado, el nuevo episodio de las aventuras del niño mago ha pulverizado todos los récords, según ha anunciado la editorial de Rowling, Bloomsbury, apoyada por un gabinete de estudios independiente.
Harry Potter y el príncipe mestizo, que salió a la venta el sábado pasado en 15 países, ha batido igualmente los récords de venta en Estados Unidos. En total, se han despachado más de nueve millones de ejemplares en ambos países, 2.009.574 de ellos en Reino Unido. Es decir, uno de cada 30 británicos no ha esperado ni un día para acudir a una librería para adquirir el libro. Preguntado sobre si esta cifra supone un hito nacional, Lucy Holden, responsable de la división infantil de Bloomsbury, ha respondido, tajante: "Sí, lo es".
"Nunca se había vendido tanto un libro el primer día en el Reino Unido", ha confirmado Kim Crooke, portavoz del gabinete de estudios Nielsen BookScan, que ha realizado el informe sobre Harry Potter para Bloomsbury. Al margen de las cifras, la crítica británica se ha mostrado dividida a la hora de juzgar la sexta entrega de la saga, y oscila entre halagar su "fórmula mágica" y reprocharle una "falta de inspiración".
"Ya no tiene inspiración"
"La espera ha valido la pena", asegura el rotativo The Daily Telegraph, que añade que "los zombies, las pociones y los besos" de la sexta entrega son una "fórmula mágica". En las más de 600 páginas del tomo se describen acontecimientos más tristes y más "oscuros" que en los anteriores episodios, algo que parece gustar a los jóvenes lectores. Para The Times, Harry Potter and the Half-Blood Prince engancha y es inteligente, pero "ya no tiene inspiración". El periódico no responsabiliza de ello a Rowling, sino a que se ha visto "empujada a escribir demasiado y demasiado rápido".
Tampoco ha reaccionado con entusiasmo The Independent, que califica el trabajo de la autora de "fofo" y "no muy bien editado". De todas formas, la última palabra la tienen los millones de lectores, jóvenes y no tan jóvenes que, fieles a la serie del aprendiz de mago y a su autora, se han lanzado a las librerías en busca de su ejemplar. La editorial Bloomsbury tenía previsto vender unos diez millones de libros en todo el mundo el primer día. Sin embargo, sólo en EE UU se vendieron 6,9 millones de ejemplares, un promedio de 250.000 ejemplares por hora, lo que supera el anterior récord, marcado precisamente por otra obra sobre el niño mago. Así, Harry Potter y la orden del Fénix, publicado en el año 2003, vendió cinco millones de copias en su primer día.
A pesar de las diferencias culturales, los seguidores de Harry Potter también son numerosos en China, donde han hecho largas horas de cola este fin de semana para convertirse en los primeros compradores del libro. Las colas, que comenzaron una o dos horas antes de que abrieran las librerías, fueron especialmente largas en las principales tiendas de libros de Pekín, aunque muchos lectores optarán por esperar a septiembre, mes en que se prevé la aparición de la edición en mandarín. En octubre de 2000, cuando los libros de Ha-li Bo-te (en mandarín) llegaron al país asiático, el fenómeno fue calificado por los críticos como "el mayor lanzamiento editorial en China desde la publicación de 'El Libro Rojo' de Mao".
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