¿Por qué es tan persistente la dana? ¿Puede haber más este otoño?: las respuestas de la ciencia sobre la gota fría
El aumento de las temperaturas del aire y de la superficie del Mediterráneo por el cambio climático aumentarán la frecuencia e intensidad de estas tormentas en España
La dana que lleva afectando a varias comunidades desde el martes es una de las más intensas registradas en los últimos años, y también una de las más mortíferas y destructivas. En este tipo de crisis no hay un solo factor que pueda explicar la magnitud de la tragedia que se está viviendo, pero sí hay algo seguro: este tipo de tormentas y eventos extremos serán cada vez más frecuentes debido al cambio climático. Estas son algunas de las preguntas y respuestas claves sobre la dana.
¿Qué es una dana?
Es una bolsa de aire de polar que se desgaja de las corrientes de circulación atmosféricas habituales y alcanza latitudes más bajas, en este caso a la península Ibérica. Dana son las siglas de Depresión Aislada en Niveles Altos, el término que usan los meteorólogos españoles que se refiere justo al fenómeno referido: una tormenta que se aísla de su localización normal y que se mueve en niveles altos de la atmósfera, a unos 5.000 metros de altitud. El interior de estas tormentas pueden estar a 20 grados bajo cero o más.
¿Por qué producen lluvias torrenciales tan fuertes?
Tradicionalmente, a las danas se las llamaba gotas frías por la gran cantidad de precipitaciones que pueden provocar en un corto espacio de tiempo, y que son comunes en las provincias orientales españolas. Hay muchos factores que pueden hacer que una dana sea más violenta. En esta ocasión han confluido varios, todos ellos conectados con el cambio climático.
Una tormenta de este tipo se alimenta de aire caliente y humedad, que suben hacia las capas altas de la atmósfera por el fenómeno de la convección. Al encontrarse con la gran bolsa de aire frío de la dana, el agua se condensa y comienzan las precipitaciones, que van descargando en distintos frentes de forma local. En esta dana, los vientos de Levante y la alta temperatura de las aguas superficiales del Mediterráneo, anormalmente cálidas para esta época del año, han hecho que la tormenta se recargase de agua una y otra vez. La presencia de montañas muy cerca de la costa ha hecho de rampa ascendente para el calor y la humedad, generando un ciclo constante.
Torrential rains caused deadly flooding and extensive damage in the province of Valencia, located in eastern Spain. These #Landsat images show the extent of flooding as of October 30, 2024.
— NASA Earth (@NASAEarth) November 1, 2024
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¿Está el Mediterráneo más caliente de lo normal?
Sí. La superficie del Mediterráneo ha alcanzado temperaturas récord este año. Aunque esas temperaturas han amainado después del verano, siguen estando unos dos grados por encima de la media registrada entre 1980 y 2000, según explica a EL PAÍS Antonio Turiel, oceanógrafo del Instituto de Ciencias del Mar (ICM-CSIC). Esto hace que el Mediterráneo tenga una cantidad de energía “inusual” para esta época del año. “Los tres primeros metros de agua superficial del océano pueden acumular tanto calor como el resto de la atmósfera junta y liberar así mucha energía”, señala.
¿Por qué está durando tanto esta dana?
La bolsa de aire polar que traía esta dana era especialmente grande, de unos 200 kilómetros de lado a lado. Estas tormentas grandes tienen más dificultades para desplazarse y pueden quedarse paradas durante más de 24 horas sobre una misma región, como ha sucedido en el área de Valencia. Sumado a lo anterior, ha provocado precipitaciones inusualmente intensas, que han llegado a superar los 600 litros por metro cuadrado. La existencia de humedad y calor constante arrastrados por el viento desde el Mediterráneo ha alimentado constantemente la tormenta y ha favorecido que hubiese varias descargas muy fuertes sobre las mismas zonas.
¿Cuándo acabará esta dana?
Esta gota fría acabará cuando desaparezcan todas estas condiciones climatológicas señaladas. Estudios sobre las tormentas e inundaciones sufridas en Europa este verano muestran que la duración de estos eventos de clima extremo está aumentando y alcanza ya varios días seguidos.
¿Puede haber más danas este otoño?
Según el oceanógrafo del CSIC, “sin duda, sí”. “Las condiciones favorables para la formación de más danas siguen existiendo, así que podríamos ver más en lo que queda de otoño”, opina. El aumento de las temperaturas hace que estos fenómenos, que hasta ahora eran típicos del otoño, sean cada vez más frecuentes e intensos. Hay otra razón para la preocupación. El polo norte se ha calentado casi cuatro veces más rápido que el resto del planeta. Esto provoca que se desbaraten los patrones normales de circulación de masas de aire por la atmósfera y facilita que grandes masas de aire frío se desgajen de la corriente en chorro polar y se instalen sobre zonas más al sur. Si las temperaturas del aire en capas más bajas y la del mar siguen siendo anormalmente altas, se amplifica el riesgo de grandes tormentas de agua y electricidad, y, por tanto, de riadas e inundaciones. “Es más leña al fuego de estos fenómenos”, resume Turiel.
¿Cuándo llegará la próxima dana catastrófica?
Probablemente, mucho antes de lo habitual. “Todos los modelos hablan de un incremento de este tipo de eventos en los próximos años y décadas”, resalta Jorge Olcina, catedrático de Geografía y director del Laboratorio de Climatología de la Universidad de Alicante. “Hasta ahora este tipo de tormentas tan catastróficas se producían cada 30 años aproximadamente. Ahora es apenas cada cinco, ya que en 2019 hubo otra dana con importantes inundaciones en la comarca de la Vega Baja [Comunidad Valenciana]. A esto tenemos que empezar a adaptar el territorio para estar a la altura”, advierte.
¿Esta tormenta es causa del cambio climático?
Es imposible decir que una tormenta concreta es causa directa del cambio climático, pero sí se puede confirmar que su intensidad y violencia se debe al aumento de las temperaturas provocadas por las actividades humanas. Eso es exactamente lo que sucedió con las graves tormentas e inundaciones de septiembre en Europa, según el panel de expertos climáticos Atribución del Clima Mundial. Según un estudio publicado por este grupo, el riesgo de riadas mortales en Europa se ha duplicado debido al cambio climático. A la espera de un estudio detallado sobre la dana en España, la climatóloga alemana Friederike Otto, líder de este grupo, aseguró a EL PAÍS que “sin duda, estos aguaceros explosivos [en España] se intensificaron con el cambio climático”.
¿Por qué el cambio climático provoca tormentas más fuertes?
Cuanto mayor es la temperatura del aire, mayor es la capacidad de la atmósfera para acumular humedad. Por cada décima de grado que sube la temperatura del aire, aumenta la humedad que es capaz de absorber, y, por tanto, la magnitud de las descargas en forma de lluvia, granizo o nieve. La temperatura global del planeta, impulsada por la quema de combustibles fósiles, ya ha subido 1,3 grados por encima de los niveles preindustriales. Un reciente informe de la ONU alerta de que si no se toman medidas adicionales para cortar las emisiones, la temperatura global va a superar los tres grados este siglo, un umbral considerado catastrófico. Europa está especialmente amenazada por estos cambios, pues es el continente donde las temperaturas están subiendo más rápido, el doble que la media del planeta.
“Estas son ya danas que podríamos llamar de segunda generación, potenciadas por el cambio climático”, explica Olcina a EL PAÍS. “Mueven mucha más energía, las formaciones nubosas son más grandes y las lluvias descargan con mucha más intensidad. Por eso apenas ha habido tiempo de reacción entre que cayeron las trombas de agua en la cabecera alta de ríos y barrancos y la riada de agua que arrasó todo a su paso”, opina.
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