Coleccionismo para principiantes

“Queremos acercar el arte y el coleccionismo al público en general”. Esa es la intención con la que Jorge Alcolea, acompañado de un nutrido grupo de galeristas y anticuarios, ha decidido poner en marcha la primera edición del Salon du Connaisseur, un encuentro a través del cual el mundo del arte y las antigüedades quiere aproximarse a los coleccionistas privados, pero también a los aprendices y curiosos. La palabra francesa connaisseur podría traducirse como “conocedor” o “experto”, y uno de los objetivos que busca esta feria es precisamente ese: conseguir que los expertos tengan un espacio en el que compartir experiencias, pero también que cualquier apasionado del arte pueda acercarse a ellos y preguntarles acerca de las obras que tienen en exposición. Porque el gran valor de esta feria es la cercanía, tanto de las propias piezas como de los especialistas que las conocen a la perfección.

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“Hemos querido reunir un abanico de todas las artes, desde el más antiguo —hay piezas de arqueología de hasta seis mil años de antigüedad— hasta el más contemporáneo”, asegura Alcolea. Pero ¿es posible meter toda la historia del arte en el espacio de 600 metros cuadrados que ocupa esta feria, ubicada durante los próximos días en el número 12 de la calle de Velázquez? Quizá no toda, pero sí una muestra bastante representativa de algunos de sus hitos más importantes, así como de las tendencias más actuales en lo que a coleccionismo de arte se refiere. Para seleccionar a los 16 expositores que forman parte de este primer Salon du Connaisseur, Alcolea ha escogido, según sus propias palabras, “a los mejores especialistas de cada época”.

Paseando entre los muchos recovecos del salón, se encuentran auténticas joyas. En el espacio de la galería Gothsland, por ejemplo, hay un dibujo preparatorio de Murillo para La visión de San Antonio de Padua, que data del siglo XVII. “Se trata de la obra más grande del pintor. La realizó para la catedral de Sevilla y fue robada en 1874. El desaprensivo ladrón recortó el fragmento de San Antonio y trató de venderlo en Nueva York. Fue gracias a este dibujo preparatorio que se pudo rehacer el cuadro”, explica el anticuario Fernando Pinós.

En la galería Félix Cervera, especializada en arqueología, se pueden contemplar piezas procedentes de la Antigua Grecia, Roma y Egipto. En la planta baja, la librería Astarloa de Bilbao muestra una impresionante Biblia incunable de 1475 o el monumental Libro de Laudes a Dios, que data del siglo XVI. Aquí también se pueden contemplar otros raros ejemplares, como Curiosidades Inauditas, una cábala judía del año 1706, que fue robada por los nazis.

Además, se exponen muebles españoles policromados del siglo XVIII en el espacio de Antigüedades Miguel Cebrián, mobiliario francés y sueco del siglo XIX en el de la galería Miquel Alzueta y de los años 60 en el de Alcolea & Krauss; joyas de los siglos XVIII y XIX en el stand de la gemóloga Marta Alcolea, pintura catalana del XIX en el de la Sala Nonell y contemporánea en el de la galería del propio Jorge Alcolea, que también forma parte del salón. De entre las 16 galerías invitadas a esta primera edición, la única no española es la Maison Californie Antiquités Design, procedente de Cannes, que cuenta con piezas que van desde la época de Luis XIV hasta la actualidad.

La idea es que el Salon du Connaisseur sea un evento itinerante, que se organice en diferentes espacios de Madrid dos veces al año; la próxima edición está prevista para finales de octubre. El historiador del arte y tasador Alfonso Area será el encargado de organizar rutas por los diferentes expositores y de resolver las dudas del público asistente. Estas rutas tendrán lugar a las 13. 00 horas y a las 18.00, aunque la muestra podrá visitarse libremente en horario ininterrumpido de 11.00 a 21.30, hasta el próximo domingo 17 de junio. La entrada es gratuita, pero hay que descargarla desde su web.