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DEBATE DE INVESTIDURA

Garrido renueva el pacto y une su destino de presidente a Ciudadanos

El nuevo dirigente de la Comunidad tiende la mano a la formación naranja para enterrar las discrepancias de la era Cifuentes

Esther Sánchez
Ángel Garrido conversa con Ignacio Aguado en el pleno de investidura.
Ángel Garrido conversa con Ignacio Aguado en el pleno de investidura.Álvaro García

Ciudadanos permitió ayer el nombramiento de Ángel Garrido como sexto presidente de la Comunidad de Madrid, en sustitución de Cristina Cifuentes, que dimitió por el caso Máster. Lo logró por un solo voto: 65 diputados votaron a favor (PP y Ciudadanos) y 64 en contra (PSOE y Podemos). Garrido tendió la mano a Ciudadanos para enterrar discrepancias, y anunció que seguirá la senda marcada por su antecesora. El lunes tomará posesión del cargo y desvelará qué cambios va a realizar. Son seguros el nombramiento de un responsable para la nueva Consejería de Justicia y la renovación de la portavocía de Gobierno.

La bancada del PP suspiró aliviada cuando terminó la votación que confirmó a Ángel Garrido, ex número dos de Cifuentes, como su sucesor. Los que tenían que votar sí (PP y Ciudadanos) cumplieron, y los que tenían que votar no (PSOE y Podemos) también. El frágil equilibrio de fuerzas del arco parlamentario, con una mayoría absoluta que depende de un solo voto —PP y Ciudadanos suman 65; PSOE y Podemos, 64—, hizo recordar el Tamayazo.

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Una vez nombrado presidente, Garrido posó junto al actual equipo —el antiguo de Cifuentes— en el hemiciclo, y aseguró en los pasillos de la Asamblea que “se dejará la piel por los madrileños”. Prometió en su discurso de investidura una línea continuista de la política de su antecesora en el cargo, porque considera óptima la gestión realizada por ella. Antes de su elección, el aspirante del PP respondió a los portavoces parlamentarios de la oposición, que le manifestaron su rechazo por mantener la misma línea política, entre otras cosas.

El nuevo presidente tendió, en cambio, la mano al portavoz de Ciudadanos, Ignacio Aguado, para rebajar el malestar que se había instalado en ambas formaciones desde que el portavoz del partido de Albert Rivera forzó la comparecencia de Cifuentes ante la comisión de investigación de la corrupción de la Asamblea. A pesar de ello, Ciudadanos continuó apoyando las leyes más importantes, como los presupuestos, ante las críticas de la oposición. Así se lo recordó la portavoz de Podemos, Lorena Ruiz-Huerta, que afeó a Aguado un discurso “imposible”, en el que es “el azote del PP por la mañana y su soporte por la tarde”. Garrido restó importancia a las discrepancias con Aguado: “Somos grupos distintos, pero hay muchas más cosas que nos acercan de las que nos alejan”. Entre ellas, destacó la misión de ambas formaciones políticas de “evitar que la Comunidad de Madrid caiga en manos de radicales”.

En su intervención, Aguado calificó la “presidencia interina [de Garrido] como la solución menos mala” y pidió al candidato una gestión “sin más turbulencias”. Asimismo, criticó la falta de referencias a la corrupción y a la regeneración democrática en su discurso. “Usted no se ha caído de una nave espacial. Está ahí como consecuencia de un escándalo [por el caso Máster]”, afirmó Aguado.

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El portavoz socialista, Ángel Gabilondo, planteó irónico a Garrido que “si todo va tan bien, igual debería continuar en la presidencia la señora Cifuentes”. Le afeó, además, que su programa estaba lleno de lagunas en cuestiones sociales y prioridades públicas, y que abundaba en el “puro mantenimiento del poder, pese a los problemas de pobreza, vivienda, igualdad y precaridad laboral en la región”.

En su réplica, el nuevo presidente alabó la figura de Gabilondo, a quien definió como “un socialista moderado”. Y añadió: “No sería ningún drama para esta Comunidad que usted gobernara”. Gabilondo calificó de “error para la Comunidad de Madrid”, el apoyo de Aguado al PP, que se produce, afirmó, “una y otra vez” y hace a Ciudadanos corresponsable de lo que ha ocurrido en la región. La portavoz de Podemos, Lorena Ruiz-Huerta, añadió que Ciudadanos ni siquiera ha pedido nada a cambio de su apoyo. Lo que le llevó a considerar a este partido como el “recambio naranja” al Gobierno actual que espera “sigiloso a que el PP termine su proceso de descomposición para asaltar el poder”.

Se mostró especialmente dura con Aguado, al que espetó: “Estremece ver a un político tan joven como usted comportarse con el cinismo de los viejos políticos”.

Las principales crisis de la pareja política

Informe de la UCO. La aparición en mayo de 2017 de un informe de la Guardia Civil que vinculaba a Cristina Cifuentes con el supuesto amaño de un contrato de la cafetería de la Asamblea marcó un antes y un después con Ciudadanos. Cifuentes compareció por ese motivo ante la comisión de investigación de la corrupción de la Asamblea y se sintió vapuleada por las preguntas de su socio de investidura.

Cifuentes planta a Aguado. El 1 de julio de 2017 Cifuentes no acudió a la reunión de la comisión de seguimiento del acuerdo de investidura entre ambos partidos. Aguado abandonó el encuentro.

Moción de censura. Ciudadanos amenazó con apoyar la moción de censura presentada por el PSOE por el caso Máster si Cifuentes no dimitía.

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Sobre la firma

Esther Sánchez
Forma parte del equipo de Clima y Medio Ambiente y con anterioridad del suplemento Tierra. Está especializada en biodiversidad con especial preocupación por los conflictos que afectan a la naturaleza y al desarrollo sostenible. Es licenciada en Periodismo por la Universidad Complutense y ha ejercido gran parte de su carrera profesional en EL PAÍS.

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