El PNV trabaja ya con el escenario de no aprobar su primer presupuesto

El PNV tiene meridianamente interiorizado que necesita cerrar acuerdos con otras formaciones si quiere tener un presupuesto propio para 2013. Pero la oposición tiene absolutamente asumido que sin negociación y acuerdos concretos en temas como fiscalidad, transportes y arquitectura institucional, no va a dar luz verde a las cuentas del primer Gabinete de Iñigo Urkullu.

 El Gobierno, ante semejante coyuntura, está trabajando ya con la hipótesis de tener que sobrevivir a lo largo de 2013 con unos presupuestos prorrogados del anterior equipo socialista.

Aunque su primera opción es reforzar las negociaciones para disponer de un instrumento propio, aunque sea muy condicionado por las enmiendas socialistas o de EH Bildu, el equipo de Ricardo Gatzagaetxebarria está preparando un plan B que se basaría en el presupuesto de 2012, —oficialmente prorrogado desde el día uno— con la adición de una serie de créditos para reforzar líneas de apoyo a sus políticas.

Hacienda prepara un plan B basado en las cuentas de 2012 y nuevos créditos

El máximo responsable institucional del PNV, Koldo Mediavilla, ratificó ayer ese extremo al asegurar que no van a escatimar esfuerzos para disponer de una herramienta económica propia, pero a renglón seguido desdramatizó el más que posible escenario de prórroga presupuestaria para todo 2013. “Económicamente no sería un drama, porque una prórroga con créditos adicionales para fomentar ciertas políticas sería casi lo mismo”, dijo ayer.

En una entrevista en Radio Euskadi, Mediavilla llegó a sugerir que sería una actitud responsable la de facilitar con la abstención que el PNV sacara adelante sus cuentas. Es decir, pidió a la oposición que no ejercite la mayoría de bloqueo, como ya atisbó con el debate del decreto de la extra, que salió adelante pero con la abstención de todos los grupos de la oposición. “Que nadie vote en contra sería un ejercicio de responsabilidad”, dejó caer. El PNV, que criticó con dureza al Gobierno de Patxi López por “débil” pese a contar con mayoría parlamentaria gracias al apoyo del PP, ahora pide apoyo a los grupos para solventar la suya.

Si económicamente la prórroga tendría solución, para el PNV sí sería un fracaso político, pero con matices. “En esta coyuntura, con un paro que avanza al 18%, el hecho de que las administraciones cuenten con una herramienta es básico”, dijo Mediavilla. “Políticamente sería un fracaso, sí, pero no del PNV sino de todas las fuerzas políticas”, subrayó el responsable institucional del PNV.

Koldo Mediavilla (PNV): “No votar en contra de los presupuestos sería responsable”

Mediavilla explicó que la formación propondrá a los partidos en el primer trimestre del año una reforma tributaria a la que se ha negado los tres últimos años. Una reforma que le ha pedido el PSE y que los socialistas quieren que se concrete en un pleno monográfico al que el Parlamento todavía no ha puesto fecha, pero que los socialistas quieren que se celebre antes del debate de las enmiendas del presupuesto.

El portavoz nacionalista tuvo duras palabras para los socialistas: “Es curioso que se exija al Gobiero vasco que explique las medidas que va a adoptar cuando Urkullu juró el 15 de diciembre”. En su opinión es muy injusto que apenas 20 días después de la investidura “los mismos que han gestionado de manera chapucera el asunto de la extra y que no fueron capaces después de tres años y medio de Gobierno de convocar en fecha el Consejo Vasco de Finanzas ahora pidan todo tipo de explicaciones y la tramitación de los presupuestos con tanta urgencia”, aseguró.