Urkullu responsabiliza al PSE y Bildu de obstaculizar los acuerdos

El lehendakari, Iñigo Urkullu, ha responsabilizado hoy a PSE y Bildu de estar obstaculizando la aprobación de los presupuestos en las distintas administraciones vascas al llegar a acuerdos en Gipuzkoa, pero no permitir la aprobación de las cuentas en Álava y Bizkaia. Urkullu ha lamentado la alianza entre socialistas y la izquierda abertzale, pero ha reiterado su voluntad a llegar acuerdos con todos los partidos para dar estabilidad institucional en el actual contexto de crisis.

"Lo que he ido viendo hasta ahora ha sido un pacto entre PSE y Bildu en determinadas instituciones, no solo en una, que se ha visto reflejado también en las actitudes, no solo para aprobar los presupuestos de Gipuzkoa, sino las actitudes de presentación de enmiendas a la totalidad a otros presupuestos", ha criticado. En declaraciones a Radio Euskadi, Urkullu ha hecho un llamamiento a los partidos para que hagan un "ejercicio de responsabilidad" en favor del interés general.

Según el lehendakari, el PNV "ha cumplido el compromiso que adquirió en ese deseo y en esa voluntad" de que las instituciones saquen adelante sus cuentas, de no presentar enmiendas de totalidad y de no votar a favor de las que otros grupos puedan presentar. "El PNV lo ha cumplido, otra cuestión será los ámbitos de negociación que hayan existido en diversas instituciones", ha añadido.

El líder del PNV no explica la abstención de su partido en las cuentas de Álava

Urkullu no ha explicado por qué el PNV se abstuvo en la votación de los presupuestos en Álava, lo que ha obligado al PP a prorrogar las cuentas de 2012 después del voto en contra de PSE y Bildu. El jefe del Gobierno Vasco ha asegurado que ya está trabajando en la elaboración de los presupuestos del próximo año para que se puedan aprobar cuanto antes, aunque no ha descartado en que la minoría del PNV en el Parlamento obligue a una prórroga. A pesar de la previsión de recorte de unos 1.400 millones, Urkullu ha anticipado que no habrá despidos de funcionarios, sino ajuste de cargos de confianza y asesores.

Sobre la paga extra, ha informado de que el Gobierno tiene intención de aprobar el próximo lunes el proyecto de ley para que la paga del próximo verano se adelante a enero. El lehendakari ha dicho ser consciente de la dificultad que va a tener el PNV para sacar adelante sus proyectos al estar en minoría y "al no haber sido posible alcanzar un gobierno de coalición".

Después de que el presidente del PNV de Bizkaia, Andoni Ortuzar, dijera que hasta que no pasen las elecciones municipales previstas en 2015 no será posible alcanzar alianzas, Urkullu ha opinado que "se haría muy largo" esperar dos años y medio para que los partidos adopten otra actitud y entablen acuerdos en favor de la estabilidad. "Apostaré por que cambien cuanto antes y trabajaré para intentar alcanzar acuerdos", ha insistido Urkullu sin hablar de forma expresa de un eventual gobierno de coalición.

También ha mostrado su disposición a abordar una reforma tributaria, como ha reclamado el PSE para aprobar los presupuestos, si bien ha afeado a los socialistas no haber presentado aún una propuesta concreta. Urkullu no ha querido vaticinar cuándo será la salida de la crisis y se ha admitido a advertir de que Euskadi va a pasar "dos años difíciles". No obstante, se ha mostrado optimista ante el futuro: "No sé cuándo, pero vamos a salir de esta". El lehendakari ha pedido también "responsabilidad" a los sindicatos, a los que les ha dicho que no pueden seguir defendiendo un modelo "del siglo XIX".