Una ONG holandesa financiará a la clínica abortista asfixiada por el Consell

Una Organización no Gubernamental (ONG) de origen holandés financiará durante los próximos tres años a Mediterránea Médica, la clínica abortista de Valencia que arrastra una deuda de 465.000 euros de impagos del Consell desde febrero. La institución benéfica, que exigió el anonimato, concederá al centro una línea de crédito sin interés para evitar su cierre hasta que llegue el dinero de la Conselleria de Sanidad. El responsable de la clínica, el ginecólogo Josep Lluís Carbonell, confía en que el acuerdo que firmó el sábado con la entidad permitirá sufragar los gastos fijos de 100.000 euros necesarios para realizar los 120 abortos mensuales procedentes de centros públicos, que proporciona el 90% de las intervenciones. La financiación servirá también para reducir las deudas de la empresa, cuyos trabajadores no cobran desde hace cuatro meses y los proveedores desde hace medio año. El dinero de la ONG se sumará a la aportación de un ciudadano “comprometido y progresista”, que se ofreció a contribuir con la clínica tras conocer su delicada situación financiera por los medios de comunicación.

Carbonell entregó el viernes un escrito al presidente de la Generalitat, Alberto Fabra, para reclamar la deuda, del que no ha recibido respuesta, salvo una conversación informal con una “funcionaria intermedia”, que se interesó por los impagos aunque no garantizó cuándo llegará el dinero.

Junto a la denuncia pública, la clínica ha iniciado una campaña para “sensibilizar” de las consecuencias de los impagos. El centro instará a partir de este lunes a sus pacientes a entregar en el registro de entrada de la Generalitat un formulario para denunciar la asfixia financiera provocada por las cantidades pendientes.

Carbonell, que también miembro de la Asociación de Clínicas Acreditativas para la Interrupción del Embarazo (Acai), que agrupa a más de una treintena de centros, garantizó que la clínica mantendrá los servicios mínimos durante el cese de actividad iniciado este lunes para protestar por la deuda. Remarcó que ninguna paciente se quedará sin abortar dentro de los plazos legales por su iniciativa.

Mediterránea Médica es uno de los tres centros privados de la Comunidad que practica abortos de alto riesgo, de hasta 22 semanas de gestación.