El teorema de Pitágoras y Vargas Llosa, en el examen de 3º de la ESO
Más de 58.000 niños realizan la prueba de Conocimientos y Destrezas Indispensables Sirve para comprobar su nivel y el quinto año que se lleva a cabo El curso pasado, suspendieron siete de cada diez estudiantes
Más de 58.000 alumnos madrileños de entre 14 y 15 años que cursan 3º de la Educación Secundaria Obligatoria (ESO) en 780 centros madrileños públicos, concertados y privados que imparten Educación Secundaria Obligatoria, han realizado entre las nueve y media de la mañana y las dos de la tarde la Prueba de Conocimientos y Destrezas Indispensables (CDI), que evalúa su nivel de conocimiento en las áreas de matemáticas y lengua de los escolares.
Se trata de un examen extra que no tendrían si estudiaran en otras comunidades. El objetivo de la prueba, que se realiza por quinto año consecutivo en la Comunidad, es comprobar el nivel de conocimientos de los alumnos que obtendrán el próximo año el título de Graduado en ESO y pasarán a Secundaria. Es obligatoria pero no computa en las notas ni condiciona el paso de curso, pero los resultados son claves para optar al Bachillerato de Excelencia, que se implantó este curso.
La prueba, a imagen y semejanza de la que se viene realizando desde hace ocho años con los alumnos de 6º de Primaria, se enfoca en conocimientos de matemáticas y la comprensión lectora. La primera es la parte de matemáticas, que incluye 10 ejercicios y la resolución de dos problemas, para lo que los alumnos han dispuesto de 90 minutos. Después, han pasado a la de lengua, que consta de un dictado y un comentario de texto y tienen otros 90 minutos. El texto es de Vargas Llosa.
“Lo difícil es aplicar el teorema de Pitágoras”
“Lo que les ha parecido más difícil es el apartado B. Necesitan el teorema de Pitágoras”. Luisa Ontoso, jefa de estudios del instituto Gran Capitán (en el distrito de Arganzuela), ha revisado el examen de matemáticas en cuanto los alumnos han acabado. Su centro es el que ha ofrecido la Consejería de Educación a la prensa para seguir el desarrollo del examen y obtuvo el año pasado una media de cinco en la prueba.
En el Gran Capitán se examina unos 200 alumnos divididos en siete grupos. Uno de los problemas es de un triángulo rectángulo. “Uno de los catetos mide tres metros y la hipotenusa cinco. Halla en metros la longitud del otro cateto”, se pide en el apartado A. El B, que es el que más ha preocupado a Luisa “porque el teorema de Pitágoras requiere un gran nivel de abstracción”, hace referencia a que los dos catetos son iguales y la hipotenusa mide la raíz cuadrada de dos centímetros. El teorema en cuestión dice que la hipotenusa al cuadrado es igual a la suma de los cuadrados de los catetos. “Halla en centímetros la longitud del cateto”. Bajo su rebeca asoma una camiseta de la marea verde con el lema Escuela pública de tod@s para tod@s.
A Paloma, de 15 años, el primer examen le ha salido “bastante bien”. Cuenta que lo prepararon en clase en los últimos días haciendo pruebas similares de otros años. Se le han resistido las hectáreas. “Ese no lo he rellenado”, confiesa la chica, cuya melena rubia esconde parte de una camiseta de la película de Tim Burton Pesadilla antes de Navidad. Está sentada en el pupitre y habla muy tranquila. “Normalmente te dan las equivalencias, aquí había que saberlas”. El enunciado del problema nueve señala que una finca rectangular mide un kilómetro de largo y 500 metros de ancho y pide el área de la finca en hectáreas. “Me he puesto nerviosa antes del examen, pero me ha sobrado tiempo”, añade la estudiante antes del receso. El segundo examen es de lengua, con dictado y pruebas de cultura general.
El curso pasado, el 70% de los alumnos -siete de cada diez- no demostró los conocimientos mínimos. La sonrojante nota media fue de un 4,08, en matemáticas apenas superaron el 2,75 y en lengua, la media fue de un 5,4. La viceconsejera achacó los malos resultados en matemáticas a una mayor precisión en los criterios de corrección y al uso generalizado de la calculadora. “Fueron las matemáticas, cambiaron los criterios de corrección”, opina medio en reproche el director del Gran Capitán, Carlos Herrán. En todo caso, los estudiantes suspenden la prueba regional en cálculo desde su implantación en 2008. La nota media de 2010 fue de 5,32, casi un punto por encima de la de 2009 (4,59).
¿Para qué sirve?
La Consejería de Educación y Empleo entregará a los directores de los centros los resultados obtenidos por cada uno de sus alumnos, con la puntuación media del colegio correspondiente y la media de toda la región. Las familias también recibirán la información sobre las calificaciones de sus hijos antes de que acabe el curso.
Al igual que la prueba que se realiza en 6º de Primaria, la de 3º de la ESO es orientativa y no condiciona el paso de curso. No obstante, quienes obtengan en la prueba una calificación media igual o superior a seis (con ambas partes aprobadas) y que, además, el próximo curso consigan el título de la ESO en junio con todas las materias aprobadas y con una nota media igual o superior a seis en las materias de Lengua Castellana y Literatura, Matemáticas, Ciencias Sociales y primera Lengua Extranjera, recibirán un Diploma de Aprovechamiento al finalizar sus estudios obligatorios.
Para los que saquen una nota media igual o superior a siete y también consigan el título de ESO con una media de al menos ocho en esas cuatro asignaturas, tendrán Mención Honorífica. Esta mención otorga al alumno automáticamente el derecho a participar en las pruebas para optar a los Premios Extraordinarios de Educación Secundaria Obligatoria.
Los alumnos premiados obtendrán un viaje cultural y un cheque de 1.000 euros. Asimismo, la Mención Honorífica es uno de los requisitos que marca la Consejería de Educación para acceder al nuevo Bachillerato de Excelencia que ha comenzado este mismo curso como prueba piloto en el IES San Mateo.
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