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Los reyes de la conspiración: por qué es difícil echar al misterioso movimiento QAnon de las redes

El grupo, considerado un peligro interno por el FBI y al que Twitter ha cerrado miles de cuentas, ha difundido innumerables teorías conspiratorias a partir de un mensaje en un remoto foro en 2017

Un asistente a un mitin de Donald Trump en agosto de 2018 en Pensilvania sostiene una enorme "Q", símbolo del movimiento QAnon.
Un asistente a un mitin de Donald Trump en agosto de 2018 en Pensilvania sostiene una enorme "Q", símbolo del movimiento QAnon.RICK LOOMIS (AFP)
Jordi Pérez Colomé

Q apareció por primera vez el 28 de octubre de 2017. Aún no hacía un año de la elección de Donald Trump. En el oscuro foro anónimo 4chan un usuario cuyo alias consistía solo en esa letra respondió a un mensaje que anunciaba la supuesta detención de Hillary Clinton. Será “entre 7.45 y 8.30am el lunes 30 de octubre”, decía. Y Q respondía con más detalles: “La extradición de HRC [Hillary Rodham Clinton] ya está en marcha efectiva ayer con varios países en caso de huida por frontera. Pasaporte aprobado para ser señalado el 30/10 a las 12.01am. Esperar que ocurran disturbios masivos como respuesta y otros huyendo de EE UU. Marines dirigirán la operación mientas Guardia Nacional activada”.

Este tono conciso, peliculero, críptico se convirtió en una de las claves de su éxito. “¿Dónde está Huma [Abedin, asesora de Clinton]? Seguid a Huma. Esto no tiene nada que ver con Rusia (aún). ¿Por qué Trump se rodea de generales? ¿Qué es la inteligencia militar?”, escribía en su segundo mensaje. Estas preguntas misteriosas y frases inconexas fueron el origen de un movimiento que ha pasado de esgrimir una rocambolesca teoría conspirativa asociada a seguidores de Trump, a convertirse en un enorme pozo negro donde se juntan antivacunas, antisemitas, antimedios y vividores... Algo que sería incomprensible sin la existencia de Internet. El pasado martes, casi tres años después de su primer mensaje, Twitter decidió suspender miles de cuentas vinculadas a este grupo con el argumento de que sus mensajes pueden conducir a la violencia.

El nombre de QAnon viene del anonimato de Q. Este presunto empleado federal no fue el primero que publicaba detalles de su trabajo en 4chan. Antes lo habían hecho usuarios como CIAAnon o FBIAnon. Pero Q, por algún motivo, recibió más atención. En el Departamento de Energía, vinculado a programas nucleares, el nivel de acceso más alto se denomina precisamente Q. También es una letra especialmente misteriosa en inglés. Pocos días después del primer mensaje, vídeos en Youtube y foros en Reddit creados por gente que aparentemente podía tener que ver con la creación de Q, popularizaron sus mensajes. Hay seguidores que pagan “por ayudar” a los investigadores o compran camisetas. Es también un buen negocio. Estas son tres claves para entender mejor QAnon.

1. Pizzagate, el pecado original

Durante la campaña electoral de 2016, una operación rusa filtró los correos electrónicos de John Podesta, jefe de campaña de Clinton. Además de banalidades y algo del cinismo habitual en política, gente anónima analizó cada mensaje en busca de claves o delitos. A alguien le pareció que los correos sobre comida parecían usar lenguaje en código que ocultaba terribles prácticas sexuales. Podesta hablaba de “cheese pizza”, es decir, “cp”, es decir, “child pornography”. También hablaba a menudo de una pizzería de un barrio acomodado de Washington, Comet Ping Pong.

Imagen de Google Maps de la pizzería Comet Ping Pong en Washington DC.
Imagen de Google Maps de la pizzería Comet Ping Pong en Washington DC.

La asociación se fue tejiendo y de repente se fue llegando a la conclusión de que en el sótano de esa pizzería alguien regentaba un prostíbulo infantil para los ricos y poderosos. En diciembre, un mes después de la elección, un joven de 28 años se levantó un domingo en un pueblo de Carolina del Norte, hizo más de 500 kilómetros hasta la capital, cogió su fusil automático y entró en Comet Ping Pong, lleno de familias con niños. Fue a abrir una puerta cerrada, la abrió de un disparo y allí, en lugar de bebés amordazados, encontró el típico almacén de un restaurante. Se entregó tras admitir que “la inteligencia no era 100% fiable”. Fue condenado a cuatro años de cárcel. ¿Cómo se enteró de todo? “Acababa de ponerme Internet en casa”, dijo a The New York Times.

Este capitulo es importante porque la trata infantil en beneficio de una panda de poderosos que dirigen el mundo desde un despacho secreto, que ordenan a medios y políticos qué deben decir y de la que Donald Trump y un selecto grupo de militares quiere liberarnos, es la base ideológica de QAnon. Los poderosos esconden curas para enfermedades, crean pandemias y combaten a seres libres como Trump. Si parece una película es porque lo es. El lema de QAnon, “Donde va uno vamos todos” (WWG1WGA, por sus iniciales en inglés), viene de la película Tormenta blanca, de Ridley Scott de 1996. De la misma película procede también otra expresión central: “La calma antes de la tormenta”.

2. Trump lanza un mensaje misterioso

En este mundillo donde cada gesto o frase es un mensaje oculto, Trump lanzó una frase perfecta en 2017. Fue en la sesión de fotos de un acto con militares en la Casa Blanca. El presidente de Estados Unidos dijo a los fotógrafos: “¿Sabéis que puede ser esto? La calma antes de la tormenta”. Algún asistente gritó: “¿Qué tormenta, señor?”. Y Trump replicó: “Ya lo veréis”. En el ámbito de las conspiraciones esta frase roza la perfección.

Esa tormenta ha sido entendida como el día en que llegarán detenciones masivas, juicios sumarísimos y quizá ejecuciones. El día del “gran despertar” -otro concepto clave de QAnon- donde todos nos daremos cuenta de quién tenía razón en realidad. En este mundo peliculero y bien distribuido los ya iniciados serían los “rojopastilleados” (redpilled, en inglés). Es una expresión de la película Matrix donde quien toma la píldora roja es capaz de ver “la verdad”. Este concepto se usa también fuera de QAnon, por ejemplo para los hombres que “por fin” han entendido lo malas que son todas las mujeres.

3. Los investigadores ‘boomers'

Desde octubre de 2017, Q ha lanzado más de 3.000 “deposiciones”. La palabra inglesa drop es la misma que se usa cuando un agente en Washington “deja” un paquete con documentos secretos en algún parque escondido para que lo recoja un funcionario ruso. Esas “deposiciones” deben ser interpretadas. Hay miles de cuentas en Twitter, vídeos en Youtube y blogs y videoblogs destinados a comentar cada frase. El objetivo es que cada cual haga su investigación para descubrir señales y la verdad.

Según QAnon, por ejemplo, una corbata amarilla de Trump durante la pandemia puede significar que todo es falso porque las banderas marítimas amarillas indican que un barco no tiene infectados. O el señuelo de la letra Q en tuits presidenciales: “I am giving consideration to a QUARANTINE”, por ejemplo. Si se quita todo lo que “sobra”, queda “I am … Q”. Que el siempre anónimo Q sea Trump es una opción muy presente en estas teorías.

Uno de los comentarios que se hace de Q es que es un LARP, siglas en inglés de juego de rol en la vida real. Sus seguidores asumirían facetas de salvadores. Si eso fuera así, si todo fuera un juego para gente mayor aburrida en un pueblo de Arkansas o Indiana que tiene ganas de creer en algo entretenido, ¿por qué se les presta tanta atención?, ¿por qué los medios y el FBI creen que son un peligro?, ¿igual lo son en realidad?

La plataforma de comunidades Reddit prohibió QAnon en 2018. Ahora ha llegado el turno de Twitter. Facebook y Youtube se lo están planteando. Es una decisión muy complicada. La medida de Twitter llega días después de que los seguidores de QAnon amenazaran a la modelo Chrissy Teigen. Le ha llegado el turno después de Tom Hanks y Lady Gaga porque, según ellos, Hollywood está también implicado en la red de pedófilos que a su vez está ligada a Jeffrey Epstein. Su detención y suicidio es uno de los grandes momentos donde QAnon y la realidad se han acercado.

Armarios de Wayfair usados en una teoría conspirativa promovida en Twitter.
Armarios de Wayfair usados en una teoría conspirativa promovida en Twitter.

Twitter no promoverá sus hashtags ni sus cuentas y prohibirá toda actividad coordinada contra alguien como Teigen. También en julio, lograron que los muebles de la cadena Wayfair se colaran entre los trending topics (temas más comentados) de la red social. ¿Por qué? Porque unos armarios especialmente caros llevaban nombres de niñas aparentemente desaparecidas. ¿De dónde venía la captura de pantalla de esta teoría loca? De Reddit.

Reddit ya había prohibido la actividad de QAnon pero ahí sigue publicado ese contenido porque no se puede demostrar que necesariamente tenga relación con ese movimiento. No es ninguna organización concreta. Este tuit de Jordan Sather donde dice que el coronavirus fue fabricado es de una cuenta con más de 180.000 seguidores. No es el único. Twitter se ha protegido para evitar que QAnon use su red para hostigar o promover sus puntos de vista. También es un paso más en su afán de controlar lo que se publica, que es algo que será uno de los grandes debates estos años.

Pero, si algo ha demostrado QAnon es su capacidad de organización. Usarán otra frase, otro hashtag. Es gente entrenada para pensar en código. Las redes, Internet, es su terreno de juego. Su capacidad de tejer conexiones inauditas para el resto de los ciudadanos es infinita. Ahora todos hablan de QAnon. Lo que hasta hace poco era un movimiento de frikis en los márgenes de la sociedad ahora llena titulares en periódicos internacionales.

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Sobre la firma

Jordi Pérez Colomé
Es reportero de Tecnología, preocupado por las consecuencias sociales que provoca internet. Escribe cada semana una newsletter sobre los jaleos que provocan estos cambios. Fue premio José Manuel Porquet 2012 e iRedes Letras Enredadas 2014. Ha dado y da clases en cinco universidades españolas. Entre otros estudios, es filólogo italiano.

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