Israel impone el toque de queda nocturno hasta después de Año Nuevo al dispararse los contagios
Territorios palestinos se confinan en Cisjordania mientras escasean los equipos para hacer pruebas en Gaza
Unidos en la adversa deriva de la pandemia, Israel y Palestina se encaminan hacia la tercera oleada de la covid-19. El Gabinete gubernamental israelí que supervisa la lucha contra el coronavirus ha aprobado este lunes imponer un toque de queda nocturno a partir del miércoles y al menos hasta el 2 de enero. La restricción de movimientos entre las 19.00 y las 5.00 del día siguiente persigue frenar la propagación de los contagios durante Januká —festividad judía familiar que se prolonga durante ocho días desde de la noche del miércoles—, Navidad y Año Nuevo.
El índice de positividad se ha duplicado en apenas dos semanas hasta alcanzar el 3,3% de las pruebas PCR realizadas. “Dentro de dos semanas se puede duplicar el número de positivos y superar los 3.000”, pronosticó el director general del Ministerio de Sanidad, Hezi Levy. “No tenemos más remedio que reimponer las restricciones si no queremos volver al confinamiento”, advirtió.
Israel, un país con poco más de nueve millones de habitantes, tiene registrados 13.158 casos activos de covid-19, frente a los 15.289 de Cisjordania y los 10.647 de Gaza. Desde el inicio de la pandemia se han registrado 2.917 muertes en el Estado judío, frente a 793 y 149 en los dos territorios palestinos.
La Autoridad Palestina ha acordado también este lunes declarar el confinamiento general en cuatro provincias de Cisjordania —incluida la de Belén en vísperas de la Navidad—, a partir del jueves y durante al menos una semana. En la franja de Gaza, la Organización Mundial de la Salud ha enviado los primeros equipos para poder efectuar pruebas de detección del coronavirus después de que se hubieran agotado la semana pasada.
La propuesta del Gabinete israelí para la pandemia, que aún tiene que ser ratificada por el Ejecutivo en pleno y refrendada por la Kneset (Parlamento), prevé una fase intermedia. Si el próximo día 20 se reduce la tasa de infecciones, se levantará el toque de queda. Pero si se superan los 3.500 casos diarios, el cierre nocturno se extenderá hasta el 2 de enero. Si para entonces se han alcanzado los 4.500 nuevos contagios diarios, Israel entrará automáticamente en el tercer confinamiento general decretado desde el mes de marzo.
“La reapertura de colegios y guarderías sin burbujas de grupos reducidos de alumnos y la de centros comerciales nos obliga a tener que celebrar las próximas fiestas solo con la familia nuclear a causa de errores cometidos por el Gobierno por segunda vez”, tronaba Sarit Rosenblum, corresponsal médica del diario Yedioth Ahronoth.
Desde que concluyó el segundo confinamiento, el 18 de octubre, las autoridades han aplicado una desescalada lenta y gradual. Esta misma semana se había completado la reincorporación a clases presenciales parciales en todos los niveles de la enseñanza, clausurada por completo desde el 18 de septiembre. La reapertura de varios centros comerciales durante la reciente campaña de rebajas del Black Friday, con aglomeraciones de clientes en las principales ciudades, ha generado una agria polémica en Israel. Estos negocios seguirán ahora abiertos en horario diurno.
El coordinador nacional para la pandemia, el doctor Nachman Ash, considera que el toque de queda nocturno es una medida que difícilmente tendrá efecto inmediato para frenar los contagios. “Me temo que solo va a servir para retrasar lo inevitable”, advierte este antiguo médico militar, “y habrá que ir preparando el confinamiento general a partir del 2 de enero”.
Información sobre el coronavirus
- Aquí puede seguir la última hora sobre la evolución de la pandemia
- Buscador de restricciones: ¿Qué puedo hacer en mi municipio?
- Así evoluciona la curva del coronavirus en el mundo
Tu suscripción se está usando en otro dispositivo
¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?
Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.
FlechaTu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.
En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.