Dos detenidos por vender falso gel hidroalcohólico que llegó a hospitales y ambulatorios de toda España

Se presentaban como “químicos de larga experiencia” que fabricaban un gel de poder desinfectante, pero lo que hacían, según la Guardia Civil, era vender un líquido mezclado con aguardiente que no tenía tales propiedades antisépticas y que elaboraban en una nave avícola de Boiro (A Coruña). El instituto armado ha detenido a dos personas que llegaron a colocar su falso gel en hospitales y centros de salud de toda España el pasado mes de abril, en el peor momento de la pandemia, aprovechando la necesidad urgente del producto para “evitar cualquier requerimiento documental y de calidad”.

La Guardia Civil calcula que lograron vender su gel adulterado durante un mes a varias distribuidoras. Fue el personal de los centros sanitarios el que dio la voz de alarma al detectar el fuerte olor a aguardiente que desprendía, informan fuentes de la investigación. En un ambulatorio decidieron analizar la composición del aquel gel y descubrieron que alcanzaba un porcentaje de un 25% de alcohol en vez del 70% que debería para tener propiedades desinfectantes, según los datos aportados por el instituto armado.

Los detenidos aprovecharon, según los investigadores, que al estallar la crisis sanitaria y ante la acuciante falta de gel hidroalcohólico en España, la Agencia Española del Medicamento autorizó el uso de alcohol etílico para producir el desinfectante, siempre y cuando alcanzara las mínimas propiedades para que que fuera efectivo. El aguardiente utilizado por los dos acusados, sin embargo, solo tiene un 30% de alcohol, muy lejos del 70% mínimo, y además estaba diluido.

La empresa era ficticia, carecía de las “autorizaciones oportunas” de la Agencia Española del Medicamento y además los números de los lotes también eran falsos, lo que complicó las pesquisas. Finalmente los agentes dieron con la nave avícola de Boiro donde los detenidos montaron presuntamente el laboratorio clandestino y allí encontraron 400 litros del falso gel ya envasado. Previamente las autoridades se habían incautado de otros 6.400 litros del produc que ya se habían distribuido por diversos puntos de España. Uno de los detenidos se encargaba de la fabricación y el otro, de ejercer labores de comercial para colocar la mercancía. Ambos son naturales de Boiro, aunque no viven en el municipio, y están en libertad con cargos.

Entre las pruebas recabadas por los investigadores se incluyen audios de Whatsapp en los que los detenidos admiten que usaban aguardiente, apuntan fuentes de la investigación. En uno de ellos, ante las quejas de una distribuidora por el fuerte olor del producto, proponían diluir más la mezcla para evitarlo, añaden las mismas fuentes, quienes aprecian “un desprecio total a la vida de las personas y el único fin de ganar dinero” en un momento en el que en España morían mil personas al día por coronavirus. Algún lote llegó incluso con faltas de ortografía.

La instrucción de la bautizada como Operación Quimigel está en manos del Juzgado de Instrucción número 2 de Ribeira y las pesquisas las ha dirigido el Equipo Territorial de Policía Judicial de Noia en colaboración con la Agencia Española del Medicamento y personal de la Consellería de Sanidade de la Xunta.

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