Bauzá se declara “inflexible” frente a las protestas de la marea verde balear

El presidente del Gobierno de Baleares, José Ramón Bauzá, del PP, ha situado como "una apuesta por la libertad" su ley de símbolos que multará con hasta 10.000 euros el uso banderas en edificios públicos "con muestras que representan a una parte de la sociedad" y pueden confundir a los ciudadanos. En el debate del Estado de la Comunidad, el líder del PP, ha dicho que las sedes oficiales no pueden ser plataforma ideológica. Esta ley busca cercenar la protesta del sector educativo en las escuelas con lazos con la bandera de las cuatro barras, identificada con la defensa de la lengua de las baleares, el catalán.

De manera solemne, al comienzo del debate, Bauzá ha expresado sus "convicciones democráticas muy profundas". Pero a la vez se ha proclamado inflexible ante las protestas de la llamada marea verde de las escuelas, con el apoyo de la oposición: "No puedo aceptar posturas de fuerzas ante las cuales nunca me doblegaré". Vindicó la mayoría social, su vocación de diálogo y el respeto a las ideas del otro.

Profundizó el líder del PP sobre el trilingüismo y el fracaso escolar, donde Baleares tiene las referencias más negativa en Europa, según siempre recuerda. "Ni la inmersión (lingüística) era culpable de todos los males ni el tratamiento integrado de lenguas TIL los solventará", reseñó.

Bauzá y el PP con mayoría absoluta pero insuficiente quiere proceder a la reducción del número de escaños de la cámara porque "se puede hacer la misma faena con menos personas". Raclamó el apoyo que le niega la izquierda y los nacionalistas. Cifró la reducción -en cuatro años- de 12 millones, con menos cargos y sueldos del Parlamento.

"Baleares lidera la recuperación económica de España", se jactó José Ramón Bauzá, presidente del Gobierno, nada más comenzar su discurso, de unas dos horas. El líder del PP reiteró su mensaje positivo al abrir el debate político de la comunidad: "Estamos bastante mejor que en junio de 2011", cuando él llegó al poder.