_
_
_
_
DESAYUNO CON... MICHAELA SCHWING

“No es necesario retocar las fotos. El mundo es bonito”

La responsable de estrategia de contenido de la agencia Getty Images cree que ahora la publicidad huye de los estereotipos

Alejandra Agudo
Michaela Schwing.
Michaela Schwing.Claudio Álvarez

Michaela Schwing (1977, Alemania) empezó a tomar fotos con 10 años, cuando le regalaron su primera cámara. No recuerda el modelo, solo que era “muy simple y rudimentaria”. Ahora, la directora de estrategia de contenidos en la agencia de fotografías Getty Images casi no se separa de su portátil, que pasea abierto y apoyado en sus brazos por el hotel en el que ha citado a la periodista para la entrevista. Continuamente le da la vuelta sobre la mesa para mostrar instantáneas o vídeos que ilustran sus palabras. “El uso de las imágenes en las redes sociales está cambiando la estética de la publicidad. Ahora se admite la imperfección”, dice.

Eso, en cuanto a la forma. “Hace cinco años era impensable encontrar fotografías desenfocadas en anuncios”, detalla. Pero también el contenido está sufriendo un vuelco, según Schwing. “La imagen comercial muestra cada vez más la diversidad social y huye de estereotipos”, resume el informe Curve. Visualizando la diversidad, que la alemana, residente en Londres, ha venido a presentar a Madrid. La homosexualidad, las familias multirraciales, las mujeres redondas y los abuelos activos son crecientemente protagonistas de la publicidad. “El estereotipo de viejo mal vestido está pasado”, abunda. Y gira el ordenador. En la pantalla, seis ancianos bailan en la discoteca, se zambullen en ropa interior en una piscina comunitaria y se hacen tatuajes, antes de comer sobre su coche un menú mexicano. Es un anuncio de la cadena de restauración Taco Bell. “Es genial”, sonríe Schwing. “Pero todavía queda mucho por hacer”.

A la experta en fotografía, también con un máster en Sociología en su currículo, se le agranda aún más la sonrisa y le chispea la mirada cuando encuentra la portada de The New Yorker en la que los personajes de Barrio Sésamo Epi y Blas ven la televisión (con los nueve jueces del Tribunal Supremo de EE UU en pantalla) abrazados. “Me encanta. Las imágenes pueden cambiar el modo de pensar de la gente”, dice respecto de la ilustración con la que el semanario celebró la histórica decisión del alto tribunal estadounidense a favor de los matrimonios homosexuales.

La influencia entre sociedad y publicidad es, según Schwing, recíproca: “Las marcas tienen que reflejar la realidad como es. Si muestras estereotipos, la gente no se sentirá identificada”. Esta vez apoya su argumento con un anuncio de moda con modelos femeninas de todas las edades, distintas razas y tallas de pantalón. “Antes, la diversidad se mostraba para crear controversia y que la gente hablara de la marca. Ahora no. Es solo la realidad”, considera. Lo que sí genera debate todavía, dice, es el uso de Photoshop en ciertas campañas. En opinión de Schwing, “no es necesario retocar las imágenes. Todos vivimos en el mundo real, que ya es bonito. Hay belleza en lo natural”.

Reconoce, sin embargo, que al terreno virtual solo llegan los mejores momentos, los felices, los divertidos. Las fotografías en las que salimos guapos. “Pero antes era peor. A mí me encanta el café. Así que hago fotos a los que tomo y las subo a Instagram”, confiesa. “Con una cámara de carrete no lo hubiera hecho. ¡Menudo desperdicio de película!”, ríe de nuevo. Esta vez, a su perfil social añadirá una instantánea de un zumo de naranja (no había de manzana) con la etiqueta: “Mi primera visita a Madrid”.

Suscríbete para seguir leyendo

Lee sin límites
_

Sobre la firma

Alejandra Agudo
Reportera de EL PAÍS especializada en desarrollo sostenible (derechos de las mujeres y pobreza extrema), ha desarrollado la mayor parte de su carrera en EL PAÍS. Miembro de la Junta Directiva de Reporteros Sin Fronteras. Antes trabajó en la radio, revistas de información local, económica y el Tercer Sector. Licenciada en periodismo por la UCM

Archivado En

Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
_
_