Sesión histórica sobre la legalización de la marihuana en el Senado de EE UU
La regulación de la sustancia en EE UU ha abierto una brecha entre las leyes federales y las estatales desde que Washington y Colorado aprobaran su uso recreativo 20 Estados más el Distrito de Columbia permiten su uso medicinal
Este martes, y por primera vez en la historia, el Comité Judicial de Senado de Estados Unidos debate sobre la legalización de la marihuana en el país; un tema que, en los últimos meses, ha abierto una brecha entre las leyes federales y las estatales desde que el pasado 7 de noviembre, día de las elecciones presidenciales, Colorado y Washington se convirtieran en las dos primeras jurisdicciones a nivel mundial en aprobar el uso recreativo de esta droga ilegal. Otros 20 Estados más el Distrito de Columbia permiten el uso medicinal de la misma para enfermos terminales, oncológicos o que padezcan graves dolores. Son muchos los que no entienden por qué el Senado ha tenido que esperar a que estos Estados apliquen nuevas regulaciones sobre el consumo de esta sustancia para ser debatida la regulación de su uso.
El 29 de agosto, el fiscal general de EE UU, Eric Holder, anunció que la Administración Obama no iba a demandar a estos dos Estados por permitir su uso recreativo, aunque Holder añadió que el Gobierno no aplicaría medidas, siempre y cuando ambos Estados mantuvieran la sustancia ilegal fuera del alcance de los menores y aplicaran medidas de regulación y suministro. Hasta este anuncio, los consumidores en estos Estados también estaban expuestos a una persecución y denuncia por parte del Gobierno Federal, al ser la marihuana una droga ilegal. Más de 750.000 personas fueron detenidas en EE UU a causa de la marihuana en 2011, según los últimos datos recogidos. De estos, el 87% de ellos fue por posesión.
El número de consumidores de esta sustancia en el país sigue en aumento, según concluyó el Estudio sobre Abuso de Drogas publicado hace varios días. Los resultados indicaron que un 7,3% de ciudadanos de 12 años o más tomó marihuana de forma frecuente el año pasado; un incremento que se lleva produciendo de forma paulatina los últimos cinco años. Este porcentaje en 2007 era de un 5,8%. Además, las encuestas muestran que la mayoría de los estadounidenses apoya la legalización de la marihuana como lo está el alcohol. Según el The Daily Chronic es muy probable que más Estados quieran legalizarla y lo lleven a votación en las próximas elecciones presidenciales de 2016.
Aunque el principal tema de la audiencia han sido las dos nuevas leyes en Colorado y Washington, muchas asociaciones y defensores del uso de esta droga han solicitado a los miembros del Comité que también revisen el porqué de la imposibilidad de adquirir marihuana para uso medicinal en los 20 Estados que aprobaron este uso, y “que está dejando a cientos de miles de enfermos sin acceso a un medicamento que es legal”, ha sostenido un portavoz de la Asociación de Acceso Seguro (ASA, por sus siglas en inglés) a The Huffington Post.
El respaldo para la legalización está creciendo en el propio Congreso. El senador republicano John McCain declaró la semana pasada: “Tal vez deberíamos legalizarla, no cabe duda que nos estamos moviendo en esa dirección. Respeto el deseo de la mayoría”. O el senador Rand Paul, que ha afirmado en más de una ocasión que hay que descriminalizar el uso de las drogas, incluida la marihuana. Mientras, en la Cámara de Representantes nueve leyes bipartidistas, incluyendo dos que intentaron acabar con la prohibición federal, han sido presentadas en los últimos años. A principios de este 2013, 225 representantes aprobaron una enmienda que permitía a las universidades plantar marihuana para investigación, siempre y cuando su uso estuviera aprobado bajo las leyes estatales.
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