El PP rechaza crear una comisión sobre niños robados en Valencia

El PP ha tumbado hoy en las Cortes valencianas una proposición no de ley de presentada por Esquerra Unida y apoyada por PSOE y Compromís para crear una comisión de investigación de los casos de robo de niños denunciados en la Comunidad Valenciana. La semana pasada los populares sí apoyaron una proposición prácticamente idéntica en el Parlamento vasco, contradicción que hizo notar la diputada de EU Esther López Barceló.

La diputada de EU, que llevaba una camiseta en la que se leía “Yo también soy el enemigo”, en alusión a los términos empleados por el jefe de la policía de Valencia para referirse a los estudiantes que protestan contra los recortes, acusó al PP de no querer ayudar a la investigación de los casos de niños robados “por si les salpica”. En su proposición no de ley se planteaba también la creación de un banco de ADN gratuito para los afectados y la puesta a disposición de la fiscalía del Tribunal Superior de Justicia de Valencia de los archivos provinciales que pudieran ayudar a esclarecer los hechos.

El PP, que presentaba una enmienda a la proposición que prácticamente sustituía a la de EU, y en la que se limitaba a ofrecer “compromiso, comprensión y solidaridad con las víctimas”, acusó a la diputada de EU de estar más preocupada por “conseguir un titular” que por ayudar a las víctimas. La diputada popular Marisol Linares calificó como “uno de los episodios más tristes de nuestra historia reciente” los robos de niños, pero se opuso a la creación de la comisión de investigación.

El tono, ya bastante agrio del debate, llegó al insulto con la intervención de la diputada socialista Modesta Salazar, que, cuando dijo en la tribuna que conocía bien el tema porque era “mujer, madre y matrona”, oyó que la parlamentaria popular Alicia de Miguel le decía “como robaban niños”, por lo que pidió que retirara inmediatamente esas palabras. De Miguel lo hizo y le pidió disculpas.

La tensión aumentó con la intervención de la parlamentaria de Compromís Mònica Oltra que, para evitar ser expulsada del pleno, vestía una camiseta cifrada que decía “Contra la brutalidad policial. Primavera valenciana”. Oltra se refirió a “las mafias ligadas a la Iglesia católica” que traficaban con niños y al “sadismo de las monjas” que niegan información a los afectados, lo que alteró al presidente de las cortes valencianas, el popular Juan Cotino, quien le exigió que no hablara de “personas que no están en la sala”. “Usted no me va a callar”, le respondió Oltra, mientras el diputado socialista Juan Soto la defendía desde su escaño, lo que provocó que, a petición de Cotino, la secretaria primera de las Cortes le amenazara con la expulsión del pleno.

Las madres de la asociación SOS Bebés Robados que habían acudido al parlamento valenciano a presenciar el debate abandonaron desilusionadas la tribuna de invitados sin haber logrado que las cortes se comprometan a crear una comisión de investigación como la que ya tiene Euskadi que les ayude, sobre todo a tener acceso a los archivos eclesiásticos. IU ha presentado propuestas en esta línea tanto en el Congreso como en el Senado.